MEDICINA - Volumen 58 - Nº 5/2, 1998
MEDICINA (Buenos Aires) 1998; 58:563-569

       
     

       
    MEDICINA, SAIC y SAI

INTERRELACION ENTRE LA REVISTA MEDICINA (BUENOS AIRES)
Y LAS SOCIEDADES ARGENTINA DE INVESTIGACION CLINICA Y DE INMUNOLOGIA

Christiane Dosne Pasqualini, Basilio A. Kotsias

Academia Nacional de Medicina de Buenos Aires e Instituto de Investigaciones Médicas Alfredo Lanari, Facultad de Medicina, Universidad de Buenos Aires

Resumen

MEDICINA (BUENOS AIRES) fue obra del Dr. Alfredo Lanari y hoy se orgullece de sus 59 años de
publicación ininterrumpida. MEDICINA es el órgano oficial de la Sociedad Argentina de Investigación Clínica (SAIC) la cual nació en 1960 por iniciativa de los mismos miembros fundadores de la revista. En 1971, durante la reunión anual de la SAIC surgió la Sociedad Argentina de Inmunología (SAI) nucleando así los numerosos investigadores vinculados a esta disciplina. Durante las reuniones anuales de ambas Sociedades se presentan los últimos datos de la gran mayoría de nuestros investigadores en biomedicina cuyos resumenes MEDICINA edita en un Número especial. Dichos datos se publican primordialmente en revistas internacionales y uno se pregunta por qué uno de cada cuatro o cinco trabajos no pueda llegar a MEDICINA para que se cumpla el propósito inicial, convirtiendose en la imagen nacional de la investigación en biomedicina.


Historia de MEDICINA (Buenos Aires)

MEDICINA (Buenos Aires) nació en octubre de 1939 por inspiración de Alfredo Lanari quien en aquel entonces tenía apenas 29 años; las Palabras Iniciales 1 recalcan que “se requiere un núcleo de personas con la capacidad científica necesaria, con el tiempo y dedicación consiguientes y con la independencia indispensable para abocarse a la tarea de revisar todas las publicaciones y de aceptar solamente aquellas que llenen las condiciones mínimas exigibles en un artículo cientí-fico....el objeto primordial reside en dar a la familia médica argentina una revista de medicina general cuya organización esté fundamentada en la calidad de los artículos originales”. Hoy MEDICINA ha cumplido 59 años de aparición ininterrumpida y ha satisfecho con creces los fines que guiaron su fundación2.
Al releer los 2 primeros Volúmenes de MEDICINA correspondientes a 1939-1941, se encuentran trabajos originales, revisiones y editoriales de literalmente todos los que en aquel entonces hacían investigación clínica o experimental en relación con la medicina, y que luego se destacaron en diversos ambientes nacionales y extranjeros; eran los discípulos de Bernardo Houssay y algunos de los de Mariano Castex - con un promedio de edad de no más de 35 años. Además, se incluyen dos trabajos - traducidos al castellano - de los dos investigadores extranjeros que mas impresión habían dejado al pasar por Buenos Aires en aquella época, Herbert Evans, descubridor de la hormona de crecimiento, y Hans Selye, el “genio del stress”3. Luego como dato trascendental, en el Volumen 4 de 1944 aparece el trabajo original de Alfredo Pavlovsky y colaboradores4 sobre el descubrimiento del factor IX como causa de la hemofilia B.
MEDICINA se inició en el Volumen 1, con 4 números anuales y 434 páginas, aumentando a 6 números a partir de 1946, con abruptas fluctuaciones en el número de páginas a través de los años2,5,6,7 (Fig.1), indudablemente reflejando las características de nuestro país. Sin embargo, la curva es significativamente ascendente. En 1997 se editaron 1228 páginas incluyendo 4 Suplementos.
A partir de 1969 a las secciones de artículos originales, casuísticas, editoriales y comentarios de libros se incorporó la sección Reunión Anatomóclínica. Esas discusiones de un caso presentado en el Ateneo del Instituto de Investigaciones Médicas Alfredo Lanari, acerca de pacientes con patologías generalmente complejas han alcanzado una difusión y repercusión no previstas, sirviendo de material de enseñanza especialmente para residentes. Poco después se incorporó la sección Cartas al Comité de Redacción para trabajos muy breves y principalmente para críticas de editoriales o trabajos publicados en Números anteriores.
MEDICINA es una revista nacional primordialmente en castellano; la publicación de artículos originales en inglés - tema todavía controvertido - se incorporó en 1969 dejando la elección del idioma a criterio de los autores. De un 10% inicial se alcanzó un máximo de 38% de trabajos en inglés en 1986. Indudablemente, esto fue un factor importante para alcanzar la incorporación de MEDICINA en Current Contents/Life Sciences en 1970, poniendola en el mapa mundial y aumentando apreciablemente su difusión y el interés de sus autores. En 1992, segun el Journal Citation Reports, SCI de Eugene Garfield, MEDICINA tiene un impacto de 0.131 y figura como 79° en el ranking mundial de las revistas de medicina. En 1995, según un artículo sobre Ciencia en el Tercer Mundo8, la Argentina ocupa el 31º lugar con un 0.352% del total de artículos a nivel mundial ( Brasil figura como 23º , México como 33º y Chile 40º).
A través de los años se ha mantenido el carácter primordialmente clínico de MEDICINA intercalado con un 33% en promedio de trabajos experimentales. Se han favorecido temas nacionales prioritarios como la fiebre hemorrágica argentina y la enfermedad de Chagas, incluso con la publicación de Suplementos en 1970, 1977, 1980, 1993 y 1997. Otros 9 Suplementos trataron diversos temas como zoonosis (1974), hematología (1981), hipertensión (1972, 77, 79), oncoinmunología (1996, 1997) enfermedades emergentes (1998) o fueron en homenaje a personalidades argentinas como Alfredo Pavlovsky (1968), Alfredo Lanari (1977) y Agustín Caeiro (1982).
En 1987, se introdujo un cambio en la portada de la revista incorporando reproducciones de cuadros de autores nacionales de la colección del Museo de Bellas Artes de Buenos Aires, y a partir de este año del Museo Castagnino de Rosario, contribuyendo así a una merecida difusión de la pintura argentina.
En la actualidad, un Comité de Redacción de 20 miembros componen la Fundación Revista Medicina presidida por Amadeo P. Barousse. Desde 1994 se reciben un promedio de 160 manuscritos por año de los cuales se rechazan el 29% y se publican el 64% con una latencia de 3-6 meses2. La revista se autofinancia con las suscripciones, el costo de páginas ($ 50 c/una), los avisos de las empresas farmacéuticos y un subsidio anual del CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas).
En 1995 se incorporó una nueva sección, Comunicaciones Breves, con la esperanza de atraer a nuestros investigadores biomédicos para la pronta publicación de sus “descubrimientos” antes de mandar los datos completos a una revista internacional de su especialidad. Es de interés nacional que se difunda localmente lo que los investigadores hacen. Con ese propósito es que se ha decidido distribuir MEDICINA a todos los socios activos de la Sociedad Argentina de Investigación Clínica.
MEDICINA sigue las normas internacionales de referato por pares y busca aumentar su caudal de trabajos experimentales. Por iniciativa del Dr. Tirao, miembro del Directorio, el CONICET apoyaría muy especialmente una revista en cada disciplina con recomendación a las respectivas Comisiones Asesoras de aumentar su indice de evaluación para fomentar la publicación a nivel nacional.
Volviendo a Las Palabras Iniciales del primer Número1, Lanari terminaba diciendo “No nos parece demasiado optimismo creer que MEDICINA logrará cumplir con los fines que guiaron su fundación. De confirmarse nuestras esperanzas, habremos hecho una obra útil para la medicina argentina”. No hay duda que se hizó y que se sigue haciendo, y que se necesita el apoyo de nuestros investigadores para hacerlo cada vez mejor.

Historia de la Sociedad Argentina de Investigación Clínica

La Sociedad Argentina de Investigación Clínica (SAIC) fue otro de los sueños de Alfredo Lanari que se hizo realidad. Junto con otros 6 investigadores clínicos, fundó la SAIC en 1960, como una Sociedad “diferente”, dedicada a “la difusión del espiritu científico en el ambiente de la medicina” caracterizada por una constructiva discusión de los trabajos presentados. Pretendía ser una Sociedad “de jóvenes” ya que por Estatuto9 los miembros titulares debían ser “menores de 55 años” pasando luego a miembros extraordinarios. Muchos se preguntaron ¿ por qué esta cláusula extravagante ya que los fundadores rondaban cerca de esa edad ? De hecho la cláusula debió ser retractada años después al gestar la Personería Jurídica, a pedido de la jueza de turno (que tenía mas de 55 años).
Es interesante recordar que Alfredo Taquini fue el primer Presidente de la SAIC seguido de Alfredo Lanari, Alfredo Pavlovsky, Raúl Carrea, Oscar Croxatto, etc. La SAIC pretendió nuclear los trabajos de investigación esencialmente clínicos referidos a la patología de las enfermedades y su tratamiento. Pero muy pronto los investigadores básicos en campos biomédicos encontraron en la SAIC un ambiente propicio para discutir sus resultados. Los trabajos a presentar fueron siempre revisados por árbitros, insistiendose en una hipótesis de trabajo. A través de los años se mantuvo la norma de “8 minutos de presentación y siete minutos de discusión”.
MEDICINA es el órgano oficial de la SAIC y ha publicado las Comunicaciones a las 42 reuniones científicas, con una sola excepción en 1984. De 40 Comunicaciones el primer año, el número aumentó paulatinamente hasta llegar a 340 en 1994 y 480 este año2, 5, 6, 7 con un pico transitorio de 316 Comunicaciones en 1969 en Bariloche (Fig. 2). A pesar de muchos altibajos y agudos problemas políticos y económicos, como con la hiperinflación del año 1989, el número de Comunicaciones siguió aumentando paulatinamente configurando una significativa curva ascendente.
Puede considerarse que la SAIC es un fiel reflejo de la producción nacional en la investigación biomédica. La Figura 3 presenta el % de comunicaciones presentadas en el año 1995 en las diferentes áreas de investigación. Se destacan inmunología (20%), seguidas de endocrinología (16%) y tumores (13%). Se crearon además nuevas secciones como las de neuroinmunoendo-crinología, neurociencias y transporte. Un factor negativo lo constituye el hecho de la disminución en la cantidad de trabajos en el área cardiovascular, probablemente por la elección de los investigadores a presentar sus trabajos en otros congresos, como el del Consejo Argentino de Hipertensión arterial.
El Presidente, elegido cada año, pone su sello científico a la Reunión; así los 43 Presidentes sucesivos fueron incorporando los temas de avanzada hasta abarcar hoy a la biotecnología, sin dejar de lado los enfoques clínicos. Es interesante recalcar que en 1970 el orador era el flamante Premio Nobel, Dr. Luis Leloir, lo que se repite este año al haber invitado al Dr. Louis Ignarro.
Es regla tácita en muchos laboratorios de investigación que cada investigador presenta en esas reuniones “lo que hizo durante el año”; además, esto significa en general la primera presentación del becario; de hecho, constituye para muchos laboratorios un informe anual y el primer paso hacia la publicación del trabajo, en general en revistas internacionales ya que relativamente pocos vienen a MEDICINA. Desde 1995 se instituyó el premio Cherny para el mejor trabajo de la Sección Multidisciplinarias a publicarse en MEDICINA como Comunicación Breve.
La Figura 4 muestra el % de trabajos presentados en 1995 por las diferentes instituciones. La Facultad de Medicina es la principal fuente de trabajos, seguida de la Facultad de Farmacia y Bioquímica y la Academia Nacional de Medicina de Buenos Aires
La Figura 5, presenta la distribución de socios de acuerdo a su lugar de trabajo, en tanto que la Figura 6 el número de socios ingresados en diferentes periodos. En la actualidad la SAIC tiene 421 socios activos. Curiosamente, a pesar de reales dificultades económicas para hacer investigación, en los últimos años la concurrencia y el número de Comunicaciones no han disminuido.
La Figura 7 presenta el % de socios de la SAIC que presentan trabajos. Aproximadamente el 50% de ellos lo hacen, porcentaje que decae bruscamente al 22% si se toman los que lo hicieron en cuatro años consecutivos. La SAIC sigue siendo una Sociedad fuerte que nuclea investigadores “jovenes” cumpliendo el propósito de su creación hace 38 años.

Historia de la Sociedad Argentina de Inmunología

La Sociedad Argentina de Inmunología (SAI) se gestó en 1971 durante la reunión de la SAIC en Rio Tercero. Al improvisar un almuerzo para los que se consideraban inmunólogos, concurrieron 60 miembros, un tercio de los participantes. A nivel de anécdota, en ese almuerzo se hizo circular una hoja para anotar el nombre de inmunólogos trabajando en el exterior: se recogieron 60 nombres; el comentario fue ¡»qué lindo Instituto de Inmunología podríamos tener con 30 inmunólogos del país y 30 del exterior“! quedó como una expresión de deseo3. Surgió entonces la idea - considerada casi como necesidad - de crear la Sociedad Argentina de Inmuno-logía, la cual nació un año después, en 1972, con 71 miembros fundadores que eligieron de Presidente a Alois Bachmann y de Vice-Presidente a Christiane Dosne Pasqualini10.
Desde su creación la SAI se reune casi todos los años conjuntamente con la SAIC y es responsable de la aceptación de los trabajos de inmunología. Estos últimos configuran uno de los tres “pilares” de la SAIC conjuntamente con los trabajos de endocrinología y de temas cardiovasculares. La SAI suele organizar, además, una reunión de invierno, preferentemente en el interior del país.
La creación de la SAI permitió su incorporación en 1972 en la IUIS (International Union of Immunological Societies) creada en 1969 con los representantes de las Sociedades de 10 países. Durante el curso del II Congreso de la SAI y I Congreso de ALAI (Asociación Latinamericana de Inmunología) realizado en Buenos Aires en 1987, se reunieron los representantes de las Sociedades de Inmunología de Brasil, Chile, Méjico y Argentina; consiguieron adaptar los estatutos de ALAI a los requerimientos de la IUIS para ser aceptada como contrapartida de la Federación Europea de Sociedades de Inmunología. En 1989, conjuntamente con IUIS y ALAI, la SAI organizó un Simposio Internacional de Inmunología en Buenos Aires con la participación de 16 disertantes extranjeros, todos de renombre en inmunología; el aporte de los inmunólogos nacionales configura el Número 2 y 3 del Volúmen 49 de MEDICINA11. El segundo Congreso de ALAI se hizo en Sao Paulo en 1990 incorporando a las Sociedades de Inmunología de Colombia, Uruguay y Venezuela, el tercero se realizó en Santiago de Chile en 1993, el cuarto en Méjico en 1996, y el quinto se realizará en Montevideo en 1999.
En la actualidad la SAI tiene 270 socios y su Presidente se renueva cada dos años. La sucesión de 25 Presidentes de la SAI, la organización de cursos y simposia internacional en colaboración con IUIS y ALAI han asegurado una amplia difusión de todos los aspectos de la inmunología abarcando todas las ramas de la biomedicina.

Conclusión

MEDICINA pretende seguir contribuyendo a la divulgación de lo mejor de la producción científica biomédica y sin duda lo mejor proviene de quienes han elegido la investigación como tarea primordial. MEDICINA nació 18 años antes de la creación del CONICET y de su Carrera del Investigador, y 20 años antes de la SAIC, y así como contribuyó a crear el espíritu y el ambiente adecuado para el nacimiento de estas dos fundamentales instituciones nacionales, desea seguir sirviendo para la difusión de sus logros con el mismo entusiasmo que demostrara Alfredo Lanari desde el inicio de MEDICINA hasta su muerte en 1985.

Bibliografía

1. Palabras iniciales. Medicina (Buenos Aires) 1940;1:1-2
2. El Comité de Redacción. MEDICINA a los 55 años. Medicina (Buenos Aires) 1995;55:1-3
3. Pasqualini CD. Sueños y realidades de un investigador. Medicina (Buenos Aires) 1992;52:483-490
4. Castex MR, Pavlovsky A, Simonetti C. Contribución al estudio de la fisiopatogenia de la hemofilia. Medicina (Buenos Aires) 1944;5:16-34
5. El Comité de Redacción. MEDICINA a los 40 años. Medicina (Buenos Aires) 1980;40:1-4
6. El Comité de Redacción. MEDICINA a los 45 años. Medicina (Buenos Aires) 1985;45:1-4
7. El Comité de Redacción. MEDICINA a los 50 años. Medicina (Buenos Aires) 1990;50:1-2 & 568-569
8. Wayt Gibbs W. Lost Science in the Third World. Scientific American 1995;273:76-83
9. Estatutos de la Sociedad Argentina de Investigación Clínica. Medicina (Buenos Aires)1960; 20:174
10. Pasqualini CD. Historia de la inmunología en la Argentina. Medicina (Buenos Aires) 1987;47:673-678
11. Pasqualini CD. Inmunología en la Argentina. Prólogo. Medicina (Buenos Aires) 1989;49:98-100