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SINDROME PULMONAR POR HANTAVIRUS EN BUENOS AIRES
SINDROME PULMONAR POR HANTAVIRUS EN LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES
VALERIA P. MARTINEZ1, SILVIA COLAVECCHIA1, MARIA GARCIA ALAY1,
BELEN SUZUKI1, AMALIA TRINCHERI2, SILVINA BUSTO3, ROBERTO RABINOVICH1,
PAULA PADULA1
1 Laboratorio de Hantavirus, Servicio de Biología Molecular,
Departamento de Virus, Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas,
ANLIS Dr. Carlos G. Malbrán, Buenos Aires; 2 Ministerio de Salud de
la Provincia de Buenos Aires - Región Sanitaria IX, La Plata; 3
Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires - Región
Sanitaria V, San Isidro.
Resumen
En
Argentina los primeros casos de Síndrome Pulmonar por Hantavirus
(SPH) se caracterizaron en 1995 y a partir de entonces es el país de
Sudamérica con mayor número de casos notificados. Esta enfermedad se
distribuye en varias provincias del país en las zonas Norte, Sur y
Centro siendo, en esta última, Buenos Aires la provincia más
afectada. En este estudio presentamos la distribución geográfica y
estacional de casos de SPH, su asociación a los diversos linajes
virales presentes y características serológicas de la infección por
hantavirus en la provincia de Buenos Aires entre los años 1997 y el
primer semestre del 2000. Se observó un aumento del número de casos
de SPH hasta 1999 y un gradual descenso de la mortalidad en todo el
período. Los casos ocurrieron entre primavera y otoño, con el
máximo en verano. Se estudió la respuesta serológica en 58 casos
confirmados de SPH a distintos tiempos después del inicio de la
enfermedad. Los casos se distribuyeron entre 27 partidos
principalmente en dos direcciones desde la Ciudad de Buenos Aires:
sur-suroeste y nor-noreste. El principal foco se localizó en La Plata
y los partidos colindantes donde ocurrieron más del 52% de los casos.
Los genomas virales provenientes de 39 casos fueron caracterizados
como virus Andes (AND): AND Cent Plata 16%, AND Cent Lec 21% y AND
Cent Bs.As. 60%. La Plata fue el único partido donde cocircularon
linajes. Estos resultados contribuirán a establecer un mapa de riesgo
que permita optimizar las estrategias de prevención.
Palabras clave: síndrome pulmonar por hantavirus,
virus Andes, Buenos Aires
Abstract
Hantavirus
pulmonary syndrome in Buenos Aires Province. In Argentina the
first Hantavirus Pulmo- nary Syndrome (HPS) cases were characterized
in 1995. Since then, Argentina is the country with the highest number
of notified cases in South America. The disease is distributed in
Northern , Southern and Central regions of the country, being Buenos
Aires the most affected province from the Central region. In this
study, we present seasonal and geographical distribution of HPS cases
in Buenos Aires province, the association with diverse viral lineages
and the serological characteristics of hantavirus infection in the
period from 1997 up to the first semester of the year 2000. An
increase in the number of HPS cases was observed up to 1999 and a
gradual mortality decrease in the whole period. The cases occurred
between spring and autumn , with a maximum peak in summer. The
serological response was studied in 58 HPS confirmed cases at
different times after the onset of symptoms. The cases were
distributed between 27 localities, in two different directions from
the city of Buenos Aires: South-southwest and North-northeast. More
than 52% of the cases occurred in La Plata and neighboring localities.
The viral genomes from 39 cases were all characterised as Andes virus
(AND): AND Cent Plata 16%; AND Cent 21% and AND Cent Bs.As. 60%. Andes
virus lineages only cocirculated in La Plata city. These results will
contribute to establish a risk map leading to the implementation of
improved strategies of prevention.
Key words: hantavirus pulmonary syndrome, Andes virus,
Buenos Aires
Dirección postal: Dra. Valeria Paula Martínez, Laboratorio
de Hantavirus, INEI-ANLIS Dr. C.G.Malbrán, Av. Vélez Sarsfield 563,
1281 Buenos Aires, Argentina
Fax: (54-11) 4301-3146 e-mail: pmartinez@anlis.gov.ar
Recibido: 29-XII-2000 Aceptado: 26-I-2001
Los hantavirus son virus envueltos, con genoma a ARN de polaridad
negativa y trisegmentado. Constituyen el único género de la familia
Bunyaviridae que se asocia a roedores como reservorios específicos en
la naturaleza. Esta asociación logra establecerse porque el virus
provoca una infección generalizada, crónica y aparentemente no
deletérea para el animal. La transmisión al hombre probablemente
ocurre por la inhalación de aerosoles contaminados con escretas
infecciosas de estos roedores o más raramente por mordedura de un
animal infectado. El género Hantavirus se subdivide en tres grupos
principales de virus diferentes genéticamente, cada uno con
reservorio en roedores de distintas subfamilias: Murinae, Arvicolinae
y Sigmodontinae.
En Asia y Europa los virus asociados a las subfamilias Murinae y
Arvicolinae producen un amplio espectro de enfermedades caracterizadas
por manifestaciones hemorrágicas y falla renal, colectivamente
referidas como Fiebre Hemorrágica con Síndrome Renal (HFRS)1, 2. En
Asia y la región Balcánica la forma más severa, 5 al 15% de
mortalidad, es provocada por virus asociados a la subfamilia Murinae,
mientras que en varios países del norte de Europa la forma más
moderada (Nefropatía epidémica), de mortalidad menor al 1%3, 4, se
asocia a virus de la subfamilia Arvicolinae de roedores.
Los hantavirus asociados a roedores sigmodontinos, causantes del
síndrome pulmonar en América, fueron identificados en 1993 debido a
un brote con alta mortalidad ocurrido en el sudoeste de los Estados
Unidos5, 6. Posteriormente se identificaron casos de Síndrome
Pulmonar por Hantavirus (SPH) en 6 países de Sud América7-12.
En Argentina los primeros casos se caracterizaron en 19956 y a partir
de entonces es el país con la mayor incidencia de SPH de Sudamérica.
Existen tres zonas afectadas del país aisladas geográficamente entre
ellas: en el noroeste las provincias de Salta y Jujuy, en el centro
Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos y en el sudoeste Neuquén, Río
Negro y Chubut. Se ha observado un incremento en el registro de casos
de SPH en Buenos Aires en los últimos años llegando a ser una de las
provincias con mayor incidencia del país. El porcentaje anual de
mortalidad por SPH en el país desde la identificación de los
primeros casos fue disminuyendo gradualmente desde un 50% hasta 23%.
A partir de un brote de SPH ocurrido en el sur de Argentina en
199613-15 se produjo un replanteamiento de los mecanismos de
adquisición de la enfermedad, ya que se comprobó la transmisión
persona a persona. Este episodio originó un cambio en el manejo de
los casos de SPH y especialmente en la vigilancia de los contactos de
esos pacientes. Posteriormente en Chile ocurrieron eventos
probablemente similares de transmisión de la enfermedad10.
Estudios previos demostraron que en Argentina, así como en Chile y
Uruguay, el virus circulante es el virus Andes (AND). Existen 5
linajes del virus AND que son característicos de cada región: AND
Sout, AND Nort, AND Cent Bs. As., AND Cent Lec y AND Cent Plata12. En
Paraguay circula predominantemente el virus Laguna Negra (LN)8 pero se
han detectado casos con secuencias similares a las del virus AND12.
El propósito del presente trabajo fue analizar la distribución
geográfica de la ocurrencia de casos de SPH en la provincia de Buenos
Aires en correlación con los linajes virales asociados. El estudio de
un número creciente de casos de SPH en la provincia amplió los
conocimientos sobre el mecanismo de transmisión de los hantavirus,
las manifestaciones clínicas de la enfermedad, los factores
individuales de riesgo y la diversidad genética del virus circulante.
Materiales y métodos
Población en estudio
En este estudio se incluyeron muestras de suero y coágulo de 477
casos sospechosos de SPH provenientes de distintos puntos de la
provincia de Buenos Aires, recibidas durante el período comprendido
entre enero de 1997 y junio del 2000. Se utilizó la siguiente
definición de caso sospechoso: aparición de una enfermedad febril
(fiebre mayor a 38°C) que requiere administrar oxígeno
suplementario, y edema intersticial difuso bilateral que se parece al
síndrome de insuficiencia respiratoria del adulto (SIRA), y que se
presenta en el término de las 72 horas de la hospitalización, en una
persona que había estado sana; o enfermedad inexplicable que culmina
en la muerte y un estudio de necropsia que señala la presencia de
edema pulmonar no cardiogénico sin una causa específica e
identificable de muerte16. Sin embargo también se recibieron muestras
de casos que no se ajustaron estrictamente a tal definición.
Se consideraron casos confirmados a los casos sospechosos de los que
se obtuvo confirmación por al menos uno de los siguientes estudios de
laboratorio: presencia de anticuerpos IgM específicos contra
hantavirus, o un incremento de cuatro veces o mayor en los títulos de
anticuerpos IgG (confirmación serológica); positividad en los
resultados de la transcripción inversa-reacción en cadena de la
polimerasa (RT-PCR) respecto al ARN de hantavirus; resultados
inmunohistoquímicos positivos de la presencia de antígenos de
hantavirus16.
Se estudiaron contactos de 28 casos confirmados de SPH, en total 462
muestras. Se consideró contacto a toda persona que estuvo en contacto
con el paciente desde los 27 días que precedieron a la aparición de
los síntomas y/o durante el tiempo que el paciente estuvo enfermo. Se
tomaron 2 muestras de cada contacto, una durante la primer semana
después de confirmado el caso índice y otra luego de los 60 días.
La primera se tomó como control para ser usada como muestra de base
en el diagnóstico. Ambas muestras fueron procesadas por ELISA para
comprobar o descartar la presencia de anticuerpos específicos contra
hantavirus, y discriminar su origen previo o posterior al evento de
riesgo.
Serología
Para la confirmación de casos de hantavirus se determinaron
anticuerpos IgM, IgG e IgA específicos contra virus AND en suero por
la técnica de ELISA usando como antígeno la nucleoproteína
recombinante del virus AND. Para la detección de anticuerpos contra
hantavirus se utilizó la técnica de ELISA captura de cadena µ de
IgM y la directa para IgG e IgA según se describió anteriormente17.
Los sueros de los contactos se procesaron para estudiar la presencia
de anticuerpos IgM e IgG por las técnicas de ELISA mencionadas.
Amplificación y caracterización del genoma viral
El ARN total se extrajo a partir de muestras de sangre total o
coágulo sanguíneo y se purificó con RNA matrix (RNaid kit, Bio 101,
La Jolla, CA). Mediante la técnica de RT-PCR anidada se amplificaron
fragmentos parciales correspondientes a los segmento M del genoma
viral, codificantes para las glicoproteínas G1 y G27, 9, 15. Los
productos de la amplificación fueron separados por electroforesis en
gel de agarosa purificados, y secuenciados manualmente por la técnica
de terminación de cadena empleando dideoxinucleótidos (fmol DNA
Sequencing System, Promega) o por secuenciación automática
(secuenciador automático ABI 377) por la técnica de secuenciación
por fluorescencia (dRhodamine Terminator Cycle Sequencing kit, Applied
Biosystem).
El análisis y comparación de las secuencias nucleotídicas se
realizó mediante el programa CLUSTAL V del PCGENE 6.8, software de
Intelligenetics Inc. (Mountain View CA). El programa DNAPars de PHYLIP
package version 3.5c (7) se usó para obtener árboles de máxima
parsimonia nucleotídica. El programa DNADist se utilizó para obtener
distancias genéticas con una relación transversión a transición de
2:1. El programa FITCH se usó para ajustar las distancias al árbol
de máxima parsimonia.
En el análisis se incluyeron las siguientes secuencias de GenBank del
segmento M: New York (NY) Virus Rhode Island-1, U36801; Sin Nombre
(SN) Virus, L25783; Laguna Negra (LN) Virus, Af005728; Bayou (BAY)
Virus, L36930; Black Creek Canal (BCC) Virus, L39950; Puumala (PUU)
Virus Sotkamo strain, X61034; Prospect Hill (PH) Virus, X55129; Seoul
(SEO) Virus, M34882; Hantaan (HTN) Virus, M14627; Andes (AND),
AF324901.
Resultados
Datos Epidemiológicos. Desde enero de 1997 a junio del 2000 se
confirmaron serológicamente en nuestro laboratorio, por
determinación de anticuerpos IgM e IgG, 58 casos de SPH sobre 477
casos sospechosos provenientes de la Provincia de Buenos Aires y
distribuidos en varios partidos. Los porcentajes de ocurrencia anual
de casos respecto a todo el país fueron 14%, 26.2%, 48% y 27% para
1997, 1998, 1999 y primer semestre del 2000 respectivamente (Fig. 1).
El aumento del número de casos registrados a lo largo de este
período logró definir un patrón claro de estacionalidad recién a
partir de 1998 como se muestra en la Fig. 2. Se observó una marcada
tendencia de ocurrencia en primavera, verano y otoño, con un claro
receso invernal. Los máximos registros anuales ocurrieron a comienzos
del verano.
La acumulación de casos de SPH por partido y la distribución
geográfica se observan en las Figs. 3 y 4 respectivamente. La
mayoría de los casos se distribuyó geográficamente entre dos áreas
que se extienden en direcciones opuestas desde la Ciudad de Buenos
Aires: sur-sudoeste y nor-noreste. En dirección oeste ocurrieron dos
casos, en La Matanza y 9 de Julio. Los casos se distribuyeron entre 27
partidos, de los cuales sólo 10 acumularon más de un caso durante el
período de estudio. Pocos partidos mostraron porcentajes
significativos, a excepción de La Plata, con más del 31% del total
de casos de la provincia (18/58). Si se tienen en cuenta, además, los
partidos colindantes a La Plata, este porcentaje supera el 52% del
total (30/58). En el sector nor-noreste, donde hubo 8 casos en total,
la zona ribereña, Tigre, Escobar y Zárate, acumuló más del 10%
(6/58), un porcentaje menor pero significativo. De los partidos
cercanos al límite provincial con la Provincia de La Pampa, sólo se
recibieron dos casos sospechosos para el estudio, ambos de Bahía
Blanca, resultando negativos.
Los casos ocurrieron en zonas rurales o semirurales debido a la
exposición previa a roedores en su hogar o en el trabajo. No se
registraron casos en zonas urbanas. Entre 40 pacientes de los cuales
se obtuvo información de sus actividades previas al inicio de la
enfermedad, el 33.3% se expuso en actividad rural combinada en muchos
casos con tareas de limpieza de galpones de almacenamiento de
herramientas y/o granos; el 13.8% sólo reportó haber realizado
tareas de limpieza y/o permaneció en viviendas inhabitadas o
depósitos de materiales; 11% se desempeñaba en tareas de transporte
de granos; 8.3% realizó desmalezamiento de terrenos; 22%
correspondió a niños y adolescentes entre los que no pudo definirse
la naturaleza del evento de exposición.
Entre los casos positivos el rango de edades fue de 5 a 68 años; tres
eran niños de 5, 9 y 10 años (5.1%); trece de entre 15 y 20 años
(22.4%); veintiuno entre 21 y 30 (36.2%), diecinueve entre 31 y 68
años (32.7%) y de 2 se desconoce.
Análisis de la respuesta serológica
El 12% (58/477) de las muestras de casos sospechosos de SPH
recibidas para determinar infección por hantavirus resultaron
positivas para IgM. El rango de días de la toma de muestras para
diagnóstico de los casos que resultaron positivos fue de 1 a 24
posterior al inicio de síntomas. De las muestras positivas para IgM
el 90.5% fue positiva para IgA y el 77% para IgG. El 23% de los casos
sin respuesta de IgG correspondió a óbitos, por lo que no se obtuvo
segunda muestra para conversión serológica. En estos casos la
confirmación fue realizada por RT-PCR. Se realizó el seguimiento de
13 casos con por lo menos 1 muestra adicional tomada durante la fase
convaleciente.
La evolución de las curvas de los anticuerpos IgM, IgG e IgA en
pacientes con SPH en la provincia de Buenos Aires se presenta en las
Figs. 5 y 6. La IgM aparece dentro de los días 1 y 2 después del
inicio de los síntomas y permanece a niveles detectables alrededor de
2 meses. La IgG comienza a detectarse con 2 o 3 días de demora con
respecto a la IgM, excediendo en la mayoría de los casos un título
final de 25.600 alrededor del día 17 y manteniéndose durante todo el
período de estudio. La respuesta de IgA varió según el paciente,
observándose casos con títulos muy altos, otros muy bajos y algunos
sin respuesta independientemente de los días posteriores al inicio de
síntomas. En la Fig. 6 se muestra la respuesta de anticuerpos de un
único paciente en un estudio de seguimiento realizado durante un
período de 13 meses. Este estudio particular concuerda con lo
expuesto en las observaciones generales, observándose respuestas
tempranas y fuertes de anticuerpos IgA, IgM e IgG. La curva de
anticuerpos IgG muestra un nivel máximo estable de densidad óptica
durante los 13 meses de seguimiento del paciente.
Cuadro clínico y severidad
La sintomatología referida comenzó como un síndrome gripal
indistinguible de otras enfermedades virales, con fiebre, cefaleas,
mialgias y astenia. La dificultad respiratoria se presentó en el 100%
de los casos comenzando de 4 a 5 días luego de los primeros
síntomas, y se manifestó con diversos grados de intensidad, desde
una disnea leve, hasta un distress respiratorio agudo (65%) con o sin
requerimiento de asistencia respiratoria mecánica. En los casos
graves el shock pulmonar evolucionó rápidamente, en el curso de 4 a
24 horas desde el comienzo de la dificultad respiratoria. El
compromiso hepático se presentó en el 84% de los casos (36/47)
manifestado por una elevación significativa de las transaminasas
hepáticas, y el 80.5% (33/41) sufrió alteraciones en la función
renal, reflejadas por los niveles de uremia y/o creatinemia, la
mayoría de los cuales no necesitaron diálisis. Un síntoma de
aparición tardía fue el de hemorragias leves, como epistaxis (7%),
petequias (10%) o un poco más relevantes como melena (7%). Se
observó compromiso neurológico en dos casos manifestándose como un
episodio convulsivo en uno de ellos y en el otro por un estado de coma
con óbito posterior.
El dato más relevante del laboratorio clínico fue el recuento de
plaquetas. El 100% de los casos manifestó plaquetopenia; el rango fue
de 20.000 a 120.000/mm3 (valor normal 150.000 a 300.000/mm3). Se
observó leucositosis en el 100% de los casos.
El cuadro clínico de los tres niños menores de 10 años también
comenzó como un síndrome gripal indiferenciado, con muy rápida
evolución a la insuficiencia respiratoria, desencadenando la muerte.
La mortalidad fue de 43%, 36%, 27% y 23% para 1997, 1998, 1999 y
primer semestre del 2000 respectivamente.
No se encontró correlación entre los cuadros clínicos manifestados
y los linaje del virus AND detectados.
Estudio de contactos
Se realizó un estricto seguimiento clínico de las personas que se
ajustaron a la definición de contacto de casos con SPH. Los contactos
estudiados permanecieron asintomáticos, excepto por dos familiares
cercanos de casos, quienes desarrollaron un síndrome gripal dentro de
la semana posterior al comienzo de síntomas del caso índice, pero
sin llegar a definirse un cuadro de compromiso respiratorio. Los dos
anteriores, así como el resto de los contactos dieron resultados
negativos para los estudios serológicos. Sin embargo, el esquema de
toma de muestras para el seguimiento serológico de los contactos (2
muestras con un intervalo de 60 días entre ellas) no se completó en
el 100% de los casos, sino que en general solamente se recibió la
primera de las dos muestras requeridas para descartar la infección
por hantavirus.
Caracterización genómica y análisis filogenético
Del total de muestras serológicamente reactivas se procesó el 83%
(49/58) para la caracterización genómica viral; de ellas 46 fueron
positivas por RT-PCR. Con el propósito de determinar relaciones
filogenéticas entre los linajes virales en de la Provincia de Buenos
Aires se analizaron por secuenciación nucleotídica genomas virales
correspondientes al segmento M (nucleótidos 2721 a 2946 de G2) de
muestras de 39 pacientes correspondientes a 21 de 27 partidos de la
provincia. Para el análisis comparativo con hantavirus de otras
regiones se utilizaron fragmentos genómicos más amplios
(nucleótidos 26 a 280 de G1 y 1753 a 2946 G2).
El árbol filogenético de máxima parsimonia (Fig. 7) muestra a los
virus relacionados al HFRS (HNT, SEO, PUU y PH) claramente
diferenciados de los causantes del SPH. A su vez dentro de este
último agrupamiento los virus de Norte América (SN, NY, BCC y BAY)
se separaron de los de Sud América donde el virus LN de Paraguay fue
el más distanciado de los cinco linajes de AND que corresponden a
virus de Argentina, Chile y Uruguay. Los cinco linajes de AND son los
más emparentados entre sí, siendo el linaje AND Sout el más
divergente. En la Provincia de Buenos Aires se caracterizaron tres
linajes entre los cuales AND Cent Lec y AND Cent Plata están más
emparentados entre sí que con AND Cent Bs. As. Se observó que en
partidos de la región nor-noreste todos los virus caracterizados
correspondieron el linaje AND Cent Lec (Fig. 4). El linaje AND Cent
Plata solo se encontró en el partido de La Plata, donde cocirculó
con AND Cent Bs. As. Todos los casos del sector sur-sudoeste y los dos
casos en dirección oeste, correspondieron al linaje AND Cent Bs.As..
Los linajes, AND Cent Lec y AND Cent Bs.As. fueron previamente
reportados como genotipos Lechiguanas (LEC) y Hu39694 (18). Los
porcentajes de diferencias nucleo-tídicas y aminoacídicas fueron
respectivamente 19.2% y 5.9% Bs.As. vs. Lec; 20% y 5.9% Bs.As. vs.
Plata; 13.4% y 3.1% Lec. vs. Plata.
Las proporciones de cada uno de los tres linajes correspondientes al
total de casos caracterizados en la provincia de Buenos Aires fueron
las siguientes: el 63% (24/39) correspondió al linaje AND Cent
Bs.As., el 20.5% (8/39) a AND Cent Lec, el 15% (6/39) a AND Cent Plata
y 1 caso al linaje AND Sout, correspondiente a un paciente con
domicilio en la provincia pero que había permanecido en San Martín
de Los Andes, Neuquén, hasta 20 días antes de iniciados los
síntomas.
Discusión
En la provincia de Buenos Aires, desde inicios de 1997 hasta el
primer semestre del 2000 se confirmaron 58 de 477 casos sospechosos de
SPH observándose un aumento en el registro anual. El total de casos
en el país fue de 249 en el mismo período, en el cual el número
anual de casos aumentó mientras que el porcentaje de mortalidad
disminuyó año a año. Inicialmente el cuadro clínico asociado a la
infección por hantavirus era grave y de rápida evolución con una
mortalidad cercana al 60%, y pocas veces se sospechaba hantavirus ante
un cuadro de gravedad moderada o leve. En los últimos años se
incrementó la experiencia tanto en el diagnóstico clínico, como en
el tratamiento de casos de SPH. En este punto cumplió un rol
fundamental la rapidez de la sospecha clínica y la del diagnóstico
del laboratorio, lo que posibilitó la implementación temprana de
tratamientos de apoyo adecuados.
Los patrones de distribución geográfica y por partido de los casos
de SPH ocurridos en la provincia sugieren que existen dos focos de
infección en dos direcciones opuestas desde la Ciudad de Buenos
Aires. Hacia el sur-sudoeste el área comprendida por La Plata y todos
sus partidos vecinos, constituyen el principal foco de infección por
hantavirus en la provincia. El hecho de que no se registren casos en
el resto de la provincia, en el límite oeste, no descarta la
posibilidad de que el SPH esté presente en estas regiones, dado que
se recibieron pocas muestras procedentes de ellas.
La estacionalidad de la enfermedad se definió claramente después del
segundo semestre de 1998. Al inicio de la primavera de 1998 y 1999
comenzaron los primeros casos, alcanzando un máximo en verano, en los
meses de diciembre y enero. En estudios previos se estimó que el
período de incubación de la enfermedad puede variar entre 12 y 27
días12, por lo que las primeras infecciones habrían ocurrido a fines
del invierno y extendiéndose durante la primavera y verano.
La respuesta humoral de IgA, IgM e IgG fue temprana. La IgM se
detectó en muestras de 1 o 2 días de evolución, lo que facilitó un
diagnóstico confirmatorio rápido. La IgA también es temprana, pero
no regular como la IgM ya que algunos pacientes no desarrollaron
respuesta. La IgG usualmente presenta un retraso de pocos días con
respecto a la IgA e IgM. Su ausencia o su presencia en bajo título ha
sido asociado estadís-ticamente en un estudio previo a casos con mala
evolución clínica12, conferiendo valor pronóstico a los títulos de
IgG. Para los casos que no presentaron anticuerpos IgG en la primer
muestra recibida se solicitó una segunda, necesaria para evaluar la
seroconversión a IgG.
La presentación clínica varió desde cuadros moderados a muy graves
según el nivel de compromiso respiratorio manifestado. El 65%
presentó cuadros graves con requerimiento de apoyo respiratorio y
tratamientos intensivos. Sin embargo la presencia de cuadros leves
aumentó significativamente a lo largo del período, contribuyendo al
descenso de la mortalidad de un año a otro. En el sur andino se
establecieron 4 formas de presentación la infección por hantavirus:
el síndrome pulmonar, síndrome febril con cefalea y miopía aguda,
síndrome febril inespecífico y la infección subclínica19. El
conocimiento de este amplio espectro clínico ayudará a detectar
casos que no se ajustan a la definición clásica de caso sospechoso,
y por lo tanto evitará el subregistro, especialmente en zonas donde
no se han reportado casos de SPH.
Los contactos de casos de SPH se sometieron a un estricto control de
seguimiento clínico para detectar precozmente cuadros compatibles. A
pesar de que algunos pacientes mantuvieron un estrecho contacto con
otras personas durante el período de incubación de la enfermedad,
ninguna de ellas desarrolló síntomas compatibles con el SPH y el
diagnóstico de laboratorio resultó negativo para aquellas que
completaron el esquema de estudio de contactos, el cual requiere dos
muestras con 60 días de diferencia. De la mayoría de los contactos
se obtuvo solamente la primer muestra por lo que no puede descartarse
la infección asintomática entre los mismos.
En trabajos previos en la región Central del país se reportaron
contactos con respuesta serológica positiva20, 21, en la mayoría de
ellos anticuerpos IgG, respuesta indicativa de infección remota. Los
contactos IgM positivos deberían ser estudiados para verificar
seroconversión a IgG mediante una segunda muestra, siendo ésta
respuesta necesaria para la confirmación de infección por
hantavirus.
Los estudios de contactos hasta el momento no indican evidencia de
transmisión interhumana en la provincia de Buenos Aires. El hecho de
que este mecanismo de transmisión se haya dado exclusivamente en el
sur de nuestro país y en el sur de Chile hace pensar en
características biológicas particulares del linaje viral de esa
región (AND Sout). Si bien no existen grandes diferencias entre las
secuencias de las proteínas virales entre los distintos linajes del
virus AND, pequeños cambios en las secuencias están asociados a
veces a alteraciones importantes en las propiedades biológicas. Como
aún no se ha excluido la posibilidad de transmisión interhumana en
esta región, se ha reiterado a la comunidad médica la importancia de
las prácticas de medidas universales de bioseguridad en el manejo de
pacientes con sospecha de SPH.
Estudios basados en la comparación de secuencias nucleotídicas
parciales del fragmento M del genoma viral, codificante para la
glicoproteína G2, sirven para determinar variabilidad viral y su
clasificación geográfica. Todos los casos de SPH correspondieron a
tres de los cinco linajes del virus AND. Se detectaron proporciones
diferentes de ellos en distintas áreas. El linaje AND Cent Lec hasta
el momento es el único circulante hacia el norte de la Ciudad de
Buenos Aires, principalmente en zonas ribereñas; AND Cent Bs.As.
hacia el sur y oeste desde la Ciudad de Buenos Aires, mientras que AND
Cent Plata se presentó únicamente en zonas suburbanas de la Ciudad
de La Plata. Esta última variante es la misma que circula en
Uruguay22. La metodología de RT-PCR, secuenciación y análisis
nucleotídico resultó ser una herramienta muy potente para determinar
el sitio de infección. En la actualidad, el gran movimiento de las
personas, sumado al hecho de que el SPH posee un tiempo de incubación
largo, de entre 12 y 27 días, hacen que los datos epide-miológicos
no resulten concluyentes en algunos casos. Mediante esta metodología
es posible diferenciar el lugar de infección de casos con más de un
sitio probable de riesgo de adquisición de la enfermedad dentro o
fuera del país.
La definición de especie viral de hantavirus se encuentra actualmente
bajo revisión. Una discusión de los genotipos virales circulantes en
cinco países de Sudamérica ya ha sido publicada12. En general, si
bien una relación directa entre datos genéticos y serológicos es
difícil de mostrar, el criterio tradicional serológico correlaciona
muy bien con los datos moleculares. Normalmente, la baja divergencia
en aminoácidos indica neutralización cruzada entre cepas virales.
Comparando los tres linajes del virus AND de Buenos Aires se obtienen
valores bajos, entre un 3% a 6% de divergencia aminoacídica. En
nuestra opinión, hasta el momento no existen suficientes evidencias
para considerar a los cinco linajes asociados a SPH circulantes en
Argentina como diferentes virus. La investigación de datos
geográficos y ecológicos basados en mantenimiento y coevolución de
diferentes reservorios primarios contribuirá a la asignación del
estado taxonómico del virus AND.
El virus AND ha sido asociado a roedores sigmodon-tinos del género
Oligoryzomys. En el sur del país el linaje viral AND Sout es
mantenido naturalmente y ocasionalmente transmitido al hombre por O.
longicaudatus, vulgarmente conocido como ratón colilargo. El linaje
AND Cent Lec ha sido asociado a O. flavescens18 pero aún no se han
encontrado los roedores asociados a los linajes AND Cent Bs.As. y AND
Cent Plata. Debido al alto grado de similitud nucleotídica entre los
tres linajes es posible que sus reservorios correspondan a otra
especie del mismo género o que los tres cocirculen simultáneamente
en diferentes poblaciones de O. flavescens, único representante del
género con distribución a lo largo de toda la provincia de Buenos
Aires23. Es de destacar que no se encontraron casos humanos asociados
a los virus Pergamino y Maciel previamente descriptos en la zona
central18, cuyos reservorios son Akodon azarae y Necromys benefactus
(ex Bolomys benefactus) respectivamente.
La distribución de casos de SPH en la Provincia de Buenos Aires es
muy amplia abarcando localidades con alta densidad poblacional, por lo
tanto, la población en riesgo potencial es grande. Ante la falta de
conocimientos sobre los roedores reservorios, la inexistencia de
vacunas y de antivirales efectivos, la principal herramienta contra
esta enfermedad actualmente es el diagnóstico rápido y la
implementación de terapias de apoyo adecuadas y tempranas en el
tratamiento de los pacientes. Estos resultados junto con estudios de
los roedores reservorios permitirán establecer un mapa de riesgo de
adquisición de la enfermedad por hantavirus en la Provincia de Buenos
Aires permitiendo optimizar las estrategias de prevención.
Agradecimientos: A los médicos, epidemiólogos y equipos de
salud por sus contribuciones y en especial al Dr. Jorge Contarelli y
al Dr. Daniel L. Pérez.
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Fig. 1.- Distribución total de los casos de Síndrome pulmonar por
hantavirus en las tres regiones afectadas de Argentina desde el año
1997 al segundo semestre del 2000. Datos del Boletín Epidemiológico
Nacional.
Fig. 2.- Distribución mensual de casos de Síndrome pulmonar por
hantavirus en la provincia de Buenos Aires desde enero de 1998 a junio
del 2000.
Fig. 3.- Distribución de casos de Síndrome pulmonar por hantavirus
de la Provincia de Buenos Aires por partido y por año.
Fig. 4.- Distribución geográfica de los linajes AND Cent Bs.As. (s),
AND Cent Lec (l) y AND Cent Plata (5) asociados a casos de Síndrome
pulmonar por hantavirus en la provincia de Buenos Aires. Se indica con
números entre paréntesis cuando se caracterizó más de un caso por
partido.
Fig. 5.- Respuesta de anticuerpos IgM, IgG e IgA específicos contra
virus AND en muestras de suero de pacientes con Síndrome pulmonar por
hantavirus. La densidad óptica (DO) graficada corresponde a la
dilución de suero 1:400. Cada punto representa la muestra de un
individuo.
Fig. 6.- Seguimiento serológico de un caso de Síndrome pulmonar por
hantavirus. Se tomaron cinco muestras del mismo paciente, la primera
durante la fase aguda y las restantes durante la fase convalesciente
por el término de 13 meses y se estudió la respuesta de anticuerpos
IgM (s), IgA(5) e IgG (l). DO: densidad óptica.
Fig. 7.- Relación filogenética del virus Andes y otros hantavirus.
Análisis basado en las diferencias nucleotídicas de fragmentos del
segmento M del genoma viral. En el árbol ampliado cada nombre
corresponde al lugar y fecha de ocurrencia del caso. Las líneas
horizontales son proporcionales a las distancias genéticas.
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