STREPTOCOCCUS PYOGENES VS PENICILINA Y
ERITROMICINA
STREPTOCOCCUS PYOGENES: SENSIBILIDAD A PENICILINA Y
ERITROMICINA EN LAS CIUDADES DE NEUQUEN Y CIPOLLETTI
SILVIA V. SORIANO1,
SUSANA BRASILI2, MONICA SAIZ3, CRISTINA CARRANZA4, PATRICIA VIDAL5,
JORGE CALDERON1, HORACIO A. LOPARDO5
1 Sección de
Bacteriología y Servicio de Infectología, Policlínico Neuquén; 2
Sección de Bacteriología, Hospital Bouquet Roldán, Neuquén; 3
Sección de Bacteriología, Policlínico Modelo, Cipolletti, Río
Negro; 4 Sección de Bacteriología, Hospital Pedro Moguillansky,
Cipolletti, Río Negro; 5 Laboratorio de Microbiología, Hospital de
Pediatría Juan P. Garrahan, Buenos Aires
Key words: Streptococcus pyogenes, erythromycin,
penicillin
Resumen
Hasta
la fecha no se ha detectado resistencia a penicilina en
Streptococcus pyogenes. No obstante se ha registrado un aumento en
la resistencia a macrólidos en varios países del mundo. En la
Argentina se han observado escasos porcentajes de resistencia a
eritromicina, a excepción de un 11.1% registrado en Mendoza. El
objetivo del presente trabajo fue estudiar la sensibilidad in vitro
a penicilina y eritromicina de 251 aislamientos sucesivos de S.
pyogenes obtenidos en cuatro centros asistenciales localizados en
las ciudades de Neuquén y Cipolletti durante el período
abril-diciembre de 1998. Se empleó el método de difusión con
discos de penicilina y el método del doble disco (eritromicina 15
µg y clindamicina 2 µg) para observar la resistencia a macrólidos
y el mecanismo involucrado. Los aislamientos resistentes a
macrólidos fueron estudiados por E-test (AB Biodisk, Solna, Suecia)
para establecer los niveles de sensibilidad a eritromicina, y por
dilución en agar para penicilina, eritromicina, ceftriaxona,
azitromicina y clindamicina. Todos los aislamientos fueron sensibles
a penicilina y treinta de ellos (12.0%) fueron resistentes a
eritromicina. Estos ?timos mostraron el fenotipo M, caracter?tico
del mecanismo de eflujo activo. Todos los aislamientos resistentes a
eritromicina (CIM entre 8 y 16 mg/l) tambi? resultaron resistentes a
azitromicina, pero sensibles a clindamicina, penicilina y
ceftriaxona. De acuerdo a estos resultados concluimos que S.
pyogenes continúa siendo sensible a la penicilina, pero creemos que
en nuestra zona es necesario realizar estudios rutinarios de pruebas
de sensibilidad a macrólidos debido al relativamente elevado
porcentaje de resistencia a eritromicina observado.
Abstract
Streptococcus
pyogenes: penicillin and erythromycin susceptibility in the cities
of Neuquen and Cipolletti. Penicillin resistance has not yet been
detected in Streptococcus pyogenes. However macrolide-resistant
streptococci have emerged in several countries. Only low rates of
erythromycin-resistant S. pyogenes were reported in Argentina, with
the exception of a 11.1% observed in Mendoza. The aim of the present
study was to determine the susceptibility to penicillin and to
erythromycin of 251 consecutive clinically-significant isolates of
S. pyogenes obtained from four centers of Cipolletti and Neuquén
during the period April-December 1998. The double disk test with
erythromycin and clindamycin disks was employed as a screening
method to detect ERY-resistant streptococci and to determine the
phenotype of macrolide resistance. Disk diffusion was also employed
for determining penicillin susceptibility. Macrolide-resistant
isolates were also tested for penicillin, ceftriaxone, erythromycin,
clindamycin and azithromycin susceptibility by the agar dilution
method. Additionally they were also tested for erythromycin
susceptibility by E-test (AB Biodisk, Solna, Sweden). All
streptococci studied were susceptible to penicillin and thirty of
them (12.0%) were resistant to erythromycin. All these resistant
isolates were also resistant to azithromycin but susceptible to
ceftriaxone and clindamycin. They showed the phenotype M (probably
efflux-mediated mechanism) and the MICs of erythromycin ranged
between 8 and 16 µg/ml. According to these results we conclude that
in spite of universal susceptibility to penicillin in S. pyogenes,
macrolide resistance is a matter of concern in Neuquén and
Cipolletti. At least in those cities it appears to be necessary to
routinely perform macrolide susceptibility tests in beta-hemolytic
streptococci.
Dirección postal: Dr. Horacio A. Lopardo, Laboratorio de
Microbiología, Hospital de Pediatría Juan P. Garrahan, Combate de
los Pozos 1881, 1245 Buenos Aires, Argentina
Fax: (54-11) 4308-5325 e-mail: hlopardo@garra.giga.com.ar
Recibido: 17-IV-2000 Aceptado: 8-VI-2000
El Streptococcus pyogenes se ha mantenido sensible a bajas
concentraciones de penicilina a través del tiempo1. Este
antibiótico continúa siendo el de primera elección para el
tratamiento de muchas de las infecciones producidas por este
microorganismo. Eritromicina, clindamicina, y los nuevos macrólidos
(roxitromicina, claritromicina, azitromicina, etc.) son drogas
alternativas especialmente indicadas en casos de hipersensibilidad a
penicilina. El uso de los nuevos macrólidos para el tratamiento de
las faringitis estreptocócicas es cada vez más frecuente debido a
su cómoda administración y buena tolerancia gástrica.
A diferencia de la uniforme sensibilidad a penicilina, se ha
descripto el aumento de la resistencia a macr?idos en varios pa?es
del mundo: Reino Unido2, Australia3, Japón4, Finlandia5, Italia6,
España7, Taiwan8.
En la Argentina, los estudios publicados hasta el momento
coincidieron en señalar la sensibilidad a penicilina de las cepas
estudiadas e informaron porcentajes muy bajos de resistencia a
eritromicina y macrólidos. En 1987, Casellas y col. no detectaron
ninguna cepa resistente a eritromicina sobre 30 aislados de S.
pyogenes estudiados9. En otro estudio, realizado entre 1989 y 1994
con 373 cepas, se detectó un 0.5% de resistencia a eritromicina
considerando todo el período. Las cepas resistentes fueron aisladas
solamente durante 1989 elevando la incidencia para ese año al 1.5%.
En 1994 se realizó un estudio multicéntrico que incluyó 1767
cepas de S. pyogenes aisladas en 58 centros de todo el país durante
los meses de mayo y octubre. La resistencia global a eritromicina
resultó del 0.14% en mayo y del 0.28% en octubre11. Sin embargo, se
observaron diferencias regionales ya que las cepas aisladas en
algunos lugares tuvieron una resistencia mayor (Concordia: 6.2-7.7%,
Mendoza: 0-1.6%). En un estudio adicional realizado en Mendoza en
1995 la resistencia a eritromicina fue del 11.1%11.
Teniendo en cuenta estas diferencias regionales, decidimos realizar
el presente trabajo para evaluar la sensibilidad a penicilina y
eritromicina en nuestra zona. En el mismo intervinieron cuatro
centros asistenciales: Policlínico Neuquén y Hospital Bouquet
Roldán de la ciudad de Neuquén y Policlínico Modelo y Hospital
Pedro Moguillansky de la ciudad de Cipolletti. Estas dos ciudades,
si bien pertenecen a diferentes provincias argentinas, se encuentran
geográficamente muy próximas e integradas en una misma región.
Se estudiaron 251 aislamientos sucesivos de S. pyogenes obtenidos a
partir de materiales clínicos de pacientes atendidos en los cuatro
centros participantes durante el período abril-diciembre de 1998.
Del total de cepas estudiadas, 69 (27.5%), fueron recuperadas de
pacientes adultos y 182 (72.5%) de pacientes pediátricos.
Doscientas treinta y dos cepas (92.4%) fueron aisladas de exudados
de fauces y 19 (7.6%) de otros materiales (heridas: 9; oído medio:
3; sangre: 3; flujo vaginal: 2; esputo: 1; senos paranasales: 1).
La identificación de los microorganismos aislados se realizó
mediante las siguientes pruebas: sensibilidad a 0.04 UI de
bacitracina con discos comerciales (Britania, Buenos Aires,
Argentina) e hidrólisis de PYR (L-pirro-lidonil-B-naftilamida) en
discos (PYR-A-ENT, Britania, Buenos Aires). Como pruebas
confirmatorias se emplearon la de Voges-Proskauer y la aglutinación
con antisuero específico con partículas de látex (Slidex
Strepto-Kit BioMérieux, Marcy l’Étoile, Francia).
Para estudiar su sensibilidad a los antibióticos se empleó el
método de difusión en medio sólido según normas NCCLS12. Los
in?ulos se realizaron a partir de estr?s en medio s?ido de 24 horas
de incubaci?, resuspendiendo colonias aisladas en caldo
Mueller-Hinton. La concentraci? bacteriana se ajust·de modo de
obtener una turbiedad equivalente a la del tubo N? 0.5 de la escala
de Mc Farland.
Se utilizó agar Mueller-Hinton (Britania, Buenos Aires), adicionado
con sangre ovina al 5% (Alfredo Gutiérrez S.R.L., Buenos Aires,
Argentina). Se emplearon discos comerciales de 10 UI de penicilina y
15 µg de eritromicina. (Britania). Las placas se incubaron 18 horas
a 35° C.
Como cepa de referencia para el control del método de difusión se
utilizó Staphylococcus aureus ATCC 25923.
Para la identificación de los mecanismos de resistencia a
macrólidos se utilizaron discos comerciales de 15 µg de
eritromicina y 2 µg de clindamicina colocados a 2.5 cm de distancia
entre sí (método del doble disco). Este método se realizó en las
mismas condiciones que las descriptas anteriormente para las pruebas
de difusión. Adicionalmente se realizaron pruebas de E-test para
eritromicina de acuerdo a las indicaciones del fabricante (AB
Biodisk, Solna, Suecia). Además, se emplearon discos de lincomicina
(10 µg), espiramicina (100 µg), pristi-namicina I (estreptogramina
B) (40 µg) y pristinamicina II (estreptogramina A) (20 µg) tal
como se describiera previamente11.
Se utilizó también el método de dilución en medio sólido con
placas de Agar Mueller Hinton adicionadas de 5% de sangre ovina y de
las diluciones de los antibióticos: penicilina (0.007-8.0 mg/l),
ceftriaxona (0.007-8.0 mg/l), eritromicina (0.06-128 mg/l),
clinda-micina (0.06-128 mg/l) azitromicina (0.06-128 mg/l). Los
inóculos bacterianos fueron de 104 UFC/gota, utilizándose un
replicador de Steers para su distribución en las placas. La
incubación se realizó en atmósfera normal a 35 °C durante 24
horas.
Las 251 cepas estudiadas resultaron ser sensibles a penicilina,
exhibiendo halos de inhibición entre 28 y 40 mm. Todas ellas fueron
identificadas como S. pyogenes por producir aglutinación con el
reactivo de látex correspondiente y por dar positivas las pruebas
de PYR y bacitracina (sensible) y negativa la de Voges-Proskauer.
Treinta cepas (12.0%) fueron resistentes a eritro- micina con halos
de inhibición entre 9 y 17 mm y 221 (88.0%) resultaron sensibles,
con halos mayores de 21 mm.
Todas las cepas resistentes a eritromicina fueron sensibles a
clindamicina, lincomicina, pristinamicinas y espiramicina cuando
fueron ensayadas por el método de difusión. Ninguna de ellas
presentó antagonismo eritromicina-clindamicina por el método de
aproximación de discos (Tabla 1).
Tanto las pruebas de E-test como las de dilución en medio sólido
mostraron datos de CIM para eritromicina entre 8 y 16 mg/l (Tabla
1).
En los ensayos de dilución, coincidentemente, las cepas resistentes
a eritromicina resultaron ser sensibles a penicilina (CIM < 0.03
mg/l) a ceftriaxona (CIM < 0.015 mg/l) y a clindamicina (CIM <
0.06 mg/l). Las CIM de azitromicina oscilaron entre 32 y 64 mg/l
(Tabla 1).
De acuerdo a los resultados obtenidos en nuestro trabajo podemos
decir que S. pyogenes contin? siendo altamente sensible a penicilina
en nuestra zona. Sin embargo, la resistencia a eritromicina fue del
12.0%. Este valor difiere de los datos publicados hasta el momento
en Argentina, donde la resistencia a este antibi?ico habitualmente
no superaba el 1.5%6, 7, 8, pero se asemeja al 11.1% de resistencia
observada en Mendoza en 199511.
El nivel de resistencia a eritromicina encontrado en nuestro estudio
nos plantea la necesidad de mantener una vigilancia epidemiológica
activa de la misma y nos alerta sobre el riesgo del uso empírico de
macrólidos en faringitis estreptocócicas. Creemos necesario en
nuestra zona la realización rutinaria de pruebas de sensibilidad a
macrólidos ante el aislamiento de S. pyogenes de materiales
clínicos.
Teniendo en cuenta que las cepas resistentes a eritromicina fueron
sensibles a clindamicina sin deformación de los halos de
inhibición, los fenotipos encontrados parecen coincidir con un
mecanismo de resistencia mediado por eflujo activo, ya descripto
anteriormente en cepas argentinas11. La posibilidad de utilización
de clindamicina frente a esas cepas motiva la necesidad del
reconocimiento del posible mecanismo involucrado debido a las
ventajas que parece aportar este antibiótico respecto de la
penicilina en el tratamiento de infecciones estreptocócicas
severas14.
Agradecimientos: A Alejandra Mastroianni por su excelente
colaboración técnica. A Alfredo Gutiérrez S.A. por el aporte de
sangre desfibrinada de oveja. A los Dres. Carlos Guardiano y Ronaldo
Meda de Laboratorios Britania SRL por su constante apoyo técnico y
por el aporte de discos de identificación y de antibiograma
Bibliografía
1. O’Brien TF. Global surveillance of antibiotic resistance. N
Engl J Med 1992; 326: 339-40.
2. Phillips G, Parratt D, Orange GV, Harper I, McEwan H, Young N.
Erythromycin-resistant Streptococcus pyogenes. J Antimicrob
Chemother 1990; 25: 723-4.
3. Stingemore M, Francis GRJ, Toohey M, McGechie DB. The emergence
of erythromycin resistance in Strepto-coccus pyogenes in Fremantle,
Western Australia. Med J Aust 1989; 150: 626-31.
4. Maruyama S, Yoshioka H, Fujita K, Takimoto M, Satake Y.
Sensitivity of group A streptococci to antibiotics. Am J Dis Child
1979; 133: 1143-5.
5. Seppala H, Nissinen A, Yu Q, Huovinen P. Three different
phenotypes of erythromycin-resistant Streptococcus pyogenes in
Finland. J Antimicrob Chemother 1993; 32: 885-91.
6. Cornaglia G, Ligozzi M, Mazzariol A, Valentini M, Orefici G. The
Italian Surveillance Group for Antimicrobial Resistance, Fontana R.
Rapid increase of resistance to erythromycin and clindamycin in
Streptococcus pyogenes in Italy 1993-1995. Emerg Infect Dis 1996, 2:
339-42.
7. P?ez Trallero E, Urbieta M, Montes M, Ayestar? I, Marim? JM.
Emergence of Streptococcus pyogenes strains resistant to
erythromycin in Gipuzkoa, Spain. Eur J Clin Microbiol Infect Dis
1998; 16: 25-31.
8. Hsueh P, Chen H, Huang A, Wu J. Decreased activity of
erythromycin against Streptococcus pyogenes in Taiwan. Antimicrob
Agents Chemother 1995; 39: 2239-42.
9. Casellas JM, Goldberg M, D’Andrea E, Arduino S, Godin M.
Actividad in vitro de roxitromicina y otros antimicro-bianos frente
a bacterias aisladas de pacientes pediátricos. Arch Arg Pediatr
1987; 85: 233-8.
10. Lopardo H, Venuta ME, Vidal P, Fernández N, Conci AM, Rubeglio
EA. Streptococcus pyogenes: Vigilancia de su resistencia a los
antibióticos en un hospital pediátrico. Infect Microbiol Clin
1995; 7: 53-6.
11. Lopardo H, Venuta ME, Vidal P, et al. The Argentinian
Streptococcus Study Group (100 participants). Argentinian
collaborative study on prevalence of erythromycin and penicillin
susceptibility in Streptococcus pyogenes. Diagn Microbiol Infect Dis
1997; 28: 29-32.
12. National Committee for Clinical Laboratory Standards.
Performance standards for antimicrobial disk susceptibility tests.
Approved standard M2-A5. Villanova, PA. National Committee for
Clinical Laboratory Standards 1995.
13. Leclercq R, Courvalin P. Intrinsic and unusual resistance to
macrolide, lincosamide, and streptogramin antibiotics in bacteria.
Antimicrob Agents Chemother 1991; 35: 1273-6.
14. Stevens DL. Streptococcal toxic-shock syndrome: spectrum of
disease, pathogenesis, and new concepts in treatment. Emerg Infect
Dis 1995; 1: 69-78.
TABLA 1.– Resultados de las pruebas de sensibilidad a los
antibióticos con 30 aislamientos de Streptococcus pyogenes
resistentes a eritromicina obtenidos en las ciudades de Neuquén y
Cipolletti, Argentina, año 1998
Antibiótico Método empleado
Difusión con discos Dilución en agar E-test
Carga Halo Categoría1 CIM Categoría CIM Categoría
(mm) (mg/l (mg/l)
Penicilina 10 UI > 28 S < 0.007-0.015 S ND ND
Ceftriaxona 30 µg > 28 S < 0.015 S ND ND
Eritromicina 15 µg 9-15 R2 8-16 R 12-16 R0
Clindamicina 2 µg 21-27 S2, 3 < 0.015 S ND ND
Azitromicina 15 µg ND ND 32-64 R ND ND
Lincomicina 10 µg 19-24 S2 ND ND ND ND
Pristinamicina I 40 µg 19-23 S2 ND ND ND ND
Pristinamicina II 20 µg 19-21 S2 ND ND ND ND
Espiramicina 100 µg 22-26 S2 ND ND ND ND
1 Categoría: S = sensible, I = con sensibilidad intermedia, R =
resistente, ND: no determinado
CIM: concentración inhibitoria mínima.
2 Estos resultados corresponden al esquema recomendado por Leclercq
y Courvalin para poder reconocer los mecanismos involucrados en la
resistencia a macrólidos13.
3 Ningún aislamiento presentó antagonismo
clindamicina-eritromicina por el método del doble disco