|
|
DISCURSO DEL
PRESIDENTE
SOCIEDAD ARGENTINA DE INVESTIGACION CLINICA
XLIV Reunión Científica
Mar del
Plata, 17 al 20 de noviembre de 1999
Discurso del Presidente
de la SAIC
Dr. Ricardo Saúl Calandra
Al tiempo de comenzar a apuntar estas líneas, tomé absoluta
conciencia de que esta Reunión de la Sociedad Argentina de
Investigación Clínica (SAIC), se halla al fin del milenio y la
centuria y que muchos de los aquí presentes, fuimos aquellos becarios
que tímidos y nerviosos nos atrevimos a presentar nuestros
incipientes trabajos de investigación frente a personalidades de la
Medicina, que desde 1960 habían comenzado a construir un reto en las
Ciencias Médicas Argentinas. Hoy, aquel 21 de abril de 1960 debe
volver a estar presente en nosotros porque el desafío de A.C.
Taquini, A. Lanari, R. Carrea, O. Croxatto, A. Pavlovsky, A. Patalano,
A. Agrest, A. Roncoroni, M. Villamil, C.A.Tanturi, J.M.Royer, F. de la
Balze, A. Mazure y A. Soubrie, cuando establecieron las bases
fundacionales de la SAIC, permanece tan vivo como entonces.
Desde la Primera Reunión de la SAIC, celebrada el 25 de noviembre de
1960, con la presidencia del Dr. Alberto C. Taquini, han transcurrido
casi 39 años y se han realizado 43 Reuniones en la Capital Federal y
distintas Provincias del país ( Buenos Aires, Córdoba, Corrientes,
Salta, Río Negro, Mendoza y Entre Ríos).
En el largo itinerario de nuestra Sociedad, se han sucedido
simultáneamente en el país cambios vertiginosos en lo
político-económico, científico e institucional, no obstante lo
cual, las bases sentadas por los fundadores fueron preservadas.
Hoy al tiempo de realizar lo que es un «ritual» en SAIC - esto es,
la lectura de los discursos de los Presidentes que me precedieron -
vislumbro a través de ellos que en la tarea conjunta hemos dado
cumplimiento, entre otros, a uno de los Objetivos fundacionales, esto
es el: «...propender al desarrollo de la Investigación Clínica y a
la difusión del espíritu científico en el ámbito de la Medicina».
También, observo con nitidez que lo que en sus comienzos constituyó
una Sociedad de Médicos interesados en la investigación, el
crecimiento de la misma llevó a la Sociedad a constituirse en una de
las más importantes Sociedades Científicas del país. Por ello, su
Primer Presidente con motivo de celebrarse el X Aniversario ( 1979 ),
afirmó que «...SAIC se ha ido constituyendo más bien en una
Sociedad de Investigadores interesados en áreas de las Ciencias
ligadas a la Medicina».
En el presente, la reunión Anual se ha tornado en un polo de
atracción para los estudiosos de la BioMedicina, que con rigor
científico sostenido, han constituído de la SAIC un ámbito
permanente de encuentro y confrontación de las presentaciones
científicas, enriqueciéndonos todos en este proceso.
Como integrantes del Sistema de Ciencia y Tecnología y a la vez
Miembros de la Sociedad, no podemos ignorar que este largo itinerario
transitado por todos nosotros ha sido paradojalmente dificultoso y
estimulante a la vez, porque el CONICET al que pertenecemos y que con
tan claros objetivos fundara el Maestro, Dr. Bernardo Houssay, ha
sufrido profundos embates en sus presupuestos al unísono de las
políticas de Gobierno que, en diferentes y aciagas etapas políticas
del país, dejaron de prestar la importancia que la Ciencia y la
Tecnología requieren, como herramientas imprescindibles del
conocimiento y el desarrollo nacional1 . No obstante ello, hemos
continuado en nuestra tarea científica con el ahínco y persistencia
propias de nuestra curiosidad científica. Para ello, la SAIC ha sido
un ámbito acogedor que nos permitió crecer en el intercambio del
conocimiento.
Esta XLIV Reunión Anual de SAIC se realiza con la Asociación
Argentina de Farmacología Experimental (SAFE) y esto ha sido motivo
de satisfacción conjunta por parte de ambas Sociedades. La
organización de la misma incluye en calidad de conferencistas a los
Dres. Felisa Molinas (Conferencia Alfredo Lanari) y Enrique T. Segura
(Conferencia Alberto C. Taquini ) y a prestigiosos expertos
extranjeros y nacionales en áreas de la Endocrinología Molecular,
Biología Molecular de la Progresión Tumoral y la Bioética.
En vista de la acogida que recibieran en 1998, se realizarán las
Mesas con Investigadores Formados, quienes disertarán sobre los
principales logros en sus líneas de investigación. En esta
oportunidad, contamos con la participación de reconocidos
científicos del país y el extranjero.
También se ha organizado una Mesa Redonda sobre «Sistema de Ciencia
y Tecnología en el Nuevo Milenio», para la que han comprometido su
asistencia representantes de distintos sectores del Sistema de
Ciencias. De manera conjunta con el Comité de Etica de la SAIC y con
apoyo de la Organización Mundial de la Salud, se organizaron las
Primeras Jornadas de Bioética, las que se desarrollaron durante el
día previo a la Reunión Anual y cuyas conclusiones se brindaron en
un Simposio con la participación de los cuatro principales Relatores
representantes de Colombia, Chile, Suiza y Argentina.
Es importante destacar que gracias a la Fundación Lucio Cherny y su
valiosa contribución económica, se premiará al mejor trabajo en la
Mesa Interdisciplinaria. También debemos señalar muy especialmente
la significativa presencia de la Fundación Gador, quién ha designado
a la SAIC en calidad de administradora para la distribución cada dos
años y en temas rotativos, del Premio E. Montuori, instituído en
homenaje a quién fuera un prestigioso colega. Del mismo modo, debemos
agradecer a la firma Rontag S.A., por el Premio al Mejor Proyecto de
Investigación presentado por Residentes Médicos o Bioquímicos.
Es nuestra intención reconocer el significativo apoyo económico de
la Agencia de Promoción Científica y Tecnológica, de la Universidad
de Buenos Aires, de distintas empresas Tecnológicas y Farmacéuticas,
del Instituto de Obra Médico Asistencial de la Provincia de Buenos
Aires y de otras fuentes, sin cuya contribución hubiera sido
imposible la concreción de esta Reunión.
Deseamos resaltar muy especialmente la importante y ágil
colaboración brindada por los integrantes de los Jurados quienes
participaron en la evaluación de los trabajos y adjudicación de
Premios. En este sentido, puede destacarse que luego del proceso
habitual de evaluación - revisión - se han aceptado en SAIC 385
trabajos los que se distribuyen en 136 Comunicaciones orales y 249
Posters. A esto deben sumarse 116 trabajos aprobados en SAFE, lo que
significará un total de 501 presentaciones.
Asimismo, deseo expresar mi más profundo reconocimiento a todos los
integrantes del Consejo Directivo de la SAIC / 99, quienes junto a la
Secretaria Administrativa Srta. Rosana Greco han coronado una labor
brillante con gran dedicación, paciencia e imaginación. Un
agradecimiento muy sentido a las amigas Isabel A. Luthy y Marta Tesone
con quienes compartí horas de intenso trabajo para concretar esta
Reunión.
En relación a otros aspectos quisiera destacar que la SAIC cuenta con
una página web (http://proteus.dna.uba.ar//saic) a la que todos
podemos acceder en nuestras consultas y en especial los Socios del
interior. Este es un logro llevado a cabo por las Dras. Isabel Luthy e
Irene Nepomnaschy.
La labor de docencia, ha sido expresada mediante un Curso intensivo
sobre «Trasducción de señales», organizado de manera conjunta con
la Sociedad Argentina de Biología y dirigido por el Dr. Omar
Pignataro. El mismo fue diseñado por la Comisión Docente de SAIC y
contó con la presencia del Dr. Mario Ascoli ( USA ), convocando a
participantes de distintos puntos del país. La Comisión Docente ha
programado para esta Reunión «Desayunos de Trabajo», con la
participación de algunos de los invitados extranjeros. Se ha
suscripto un convenio con la Escuela Europea de Oncología, para la
realización en el país de eventos conjuntos y el primero tendrá
lugar en abril del 2000.
También es necesario referirnos a la imposibilidad de concretar la
puesta en marcha de la Maestría en Investigación Clínica, cuya
materialización se halla sujeta al trámite administrativo,
debiéndose procurar mayores esfuerzos en tal sentido.
En lo institucional ha sido posible renovar los Delegados del
Interior, a través de un proceso de nominación local. Así, se ha
nominado en Rosario al Dr. O. Laudanno, en Tucumán a la Dra. N. Ruiz
de Martinez, en Pergamino a la Dra. A. Briggiler, en Mendoza al Dr. R.
Cabrera, en La Plata a la Dra. A. Grassi y en Córdoba se efectuará
la nominación en corto tiempo. En cuanto al número de Socios debo
manifestar que se ha dado cumplimiento al mandato de la Asamblea
respecto a los Socios morosos, resultando el número actual de
Miembros de esta Sociedad de 422, además de las numerosas
postulaciones presentados para su admisibilidad.
Para finalizar, quiero poner énfasis en uno de los principios que han
regido el quehacer de nuestra Sociedad, esto es nuestra contribución
al avance de la Ciencia Biomédica como herramienta imprescindible en
el desarrollo de la medicina moderna.
Más aún, prontos a iniciar el camino de la nueva centuria nuestra
tarea silenciosa y constante deberá seguir acompañando al desarrollo
de las Ciencias, no solo por las Ciencias en sí mismas, sino por
nuestro compromiso con el desarrollo de nuestro país, donde se halla
comprometido nuestro futuro y el de nuestros hijos. Por ello, es que
deseamos ser optimistas en cuanto al establecimiento definitivo de las
transformaciones tan ansiadamente reclamadas por la comunidad
científica a lo largo de muchos años. Porque como decía el Fundador
de la Universidad Nacional de La Plata, Joaquín V. González2:
«...no soy un pesimista ni un desencantado, ni un vencido, ni un
amargado por derrota ninguna, a mí no me ha derrotado nadie; y aunque
así hubiera sido, la derrota sólo habría conseguido hacerme más
fuerte, más optimista, más idealista; porque los únicos derrotados
en este mundo son los que no creen en nada, los que no conciben un
ideal, los que no ven más camino que el de su casa o su negocio, y se
desesperan y reniegan de sí mismos, de su patria y de su Dios, si lo
tienen, cada vez que les sale mal algún cálculo financiero o
político de la matemática de su egoísmo! Trabajo va a tener el
enemigo para desalojarme a mí del campo de batalla! El territorio de
mi estrategia es infinito, y puedo fatigar, desconcertar, desarmar, y
aniquilar al adversario, obligándolo a recorrer distancias
inmensurables, a combatir sin comer, ni beber, ni tomar aliento, la
vida entera, y cuando se acabe la tierra, a cabalgar por los aires
sobre corceles alados, si quiere perseguirme por los campos de la
imaginación y del ensueño. Y después el Enemigo no puede renovar su
gente, por la fuerza o por el interés, que no resisten mucho tiempo;
y entonces, o se queda solo, o se pasa al Amor, y es mi conquista, y
se rinde con armas y bagajes a mi ejército invisible e invencible».
Es entonces que imbuído de ese espíritu, es un honor muy particular
dejar inaugurada esta XLIV Reunión Anual de la Sociedad Argentina de
Investigación Clínica, agradecer a todos los concurrentes su
presencia y en especial la disposición a la “ confrontación
científica” en la concepción de los fundadores y a su vez
desearles en nombre del Consejo Directivo SAIC/99 pleno éxito en la
estadía.
Bibliografía
1. Ricardo S. Calandra. Si yo fuera Presidente del CONICET.
Medicina (Buenos Aires) 1999; 59: 393-7.
2 Fragmento del discurso de Joaquín V. González «La Universidad y
el alma argentina», 18/09/1918
|
|
|
|
|