MEDICINA - Volumen 59 - Nº 4, 1999
MEDICINA (Buenos Aires) 1999; 59:375-376

       
     

       
   
IMAGENES

Enfermedad diverticular de intestino delgado

Alejandro R. Grinberg, Leonardo A. Paz
Instituto de Investigaciones Médica Alfredo Lanari, Facultad de Medicina, Universidad de Buenos Aires

Mujer de 93 años de edad con demencia, fibrilación auricular e hipertensión arterial; ingresó al Instituto de Investigaciones Médicas por accidente cerebro vascular isquémico silviano extenso. Al cuarto día de internación presentó episodio de broncoaspiración masiva y falleció. No tenía antecedentes de sintomatología digestiva. La autopsia evidenció una enfermedad diverticular en yeyuno-íleon. El fragmento de intestino delgado (Fig. 1) presenta múltiples divertículos, localizados en el borde antimesentérico. Los divertículos miden entre 1 y 3.5 cm y comprometen yeyuno e íleon, desde el ángulo de Treitz hasta la válvula ileocecal, más numerosos en yeyuno. Los diver-tículos corresponden a herniaciones saculares de la mucosa a través de la muscular, de paredes delgadas, con amplios orificios que los comunican con la luz intestinal (Fig. 2).
Esta rara enfermedad se observa en la sexta o séptima década de la vida, generalmente asintomáti- ca; cuando da síntomas, (10 a 30% de los casos) consisten en dolor abdominal intermitente, flatulencia, diarrea o constipación. El diagnóstico radio- lógico es difícil, siendo la enteroclisis el método más adecuado para su visualización. El 6 a 10% de los casos sufren complicaciones que pueden ser obstrucción, diverticulitis, hemorragia, perforación, mala absorción de vitamina B12 o dolor abdominal debilitante crónico. El tratamiento es conservador; está indicada la cirugía sólo en caso de complicaciones.

 

Angiomatosis retinae como única manifestación de la enfermedad de Von Hippel Lindau

Erica L. Bossana, Xavier S. Ponssa, C. Patricio Juárez Beltrán, José D. Luna Pinto
Fundación VER, Córdoba


Paciente de 21 años de edad, sexo masculino, que consulta por disminución de agudeza visual de ojo izquierdo. Al examen oftalmológico se constata un defecto pupilar aferente y, en el fondo de ojos, se observa una tumoración con vasos tortuosos sobre la arcada vascular inferior del mismo ojo (Fig. 1, 2). La angiomatosis retinae (Fig. 1, 2) aislada como única presentación de la enfermedad de Von Hippel Lindau es rara (1 en 22.500)1. Anteriormente, el diagnóstico del Síndrome de Von Hippel Lindau requería que tanto los hemangioblasto-mas retinales como cere- belares estuvieran presentes en el mismo individuo. Melmon y Rosen2 expandieron el criterio diagnóstico para incluir cualquier manifestación del complejo sindrómico. El clásico angioma reti- nal es alimentado por una sola arteria tortuosa y dilatada y su drenaje por una vena de apariencia similar a la arteria que regresa al disco óptico3 (Fig. 1, 2).

Biliografía

1. Pinkerton OD. Angioma of the retina: report of two cases with fundus photographs. Am J Ophthalmol 1946; 29: 711.
2. Melmon KL, Rosen SW. Lindau’s disease: review of the literature and study of a large kindred. Am J Med 1964; 36: 595.
3. Welch RB. Von Hippel Lindau disease: the recognition and treatment of early angiomatosis retinae and the use of cryosurgery as adjunct to therapy. Trans Am Ophthalmol Soc 1970; 66: 367.