|  |  | ENCUESTA SOBRE TRATAMIENTO DEL ASMA ENCUESTA A MEDICOS ESPECIALISTAS SOBRE EL TRATAMIENTO DEL ASMA
          BRONQUIAL* GUILLERMO A. RAIMONDI Instituto de
          Investigaciones Neurológicas Raúl Carrea, FLENI, Buenos Aires * Parcialmente presentado en el III Congreso Iberoamericano de
          Neumonología. Viña del Mar, Chile, noviembre 1994 Key words: asthma, treatment Resumen  Se
          realizó una encuesta a un grupo de 300 especialistas de pulmón
          provenientes de un listado de la totalidad del país. Esta se refería
          a tratamiento del acceso agudo y especialmente en asma estable, tanto
          en adultos como en niños mayores de 6 años. Se obtuvieron 98
          respuestas (32.7% de los cuestionarios enviados). Los encuestados se
          definían especialistas en Neumonología (N) 71%, N + Medicina Interna
          (MI) 12%, N + Alergia (A) 6%, A 5%, MI 4% y MI + A 2%. Respecto al
          tratamiento del asma agudo eligieron como primera opción los beta
          agonistas inhalados (BAI) el 57.5% de los encuestados en adultos y el
          63.4% en niños, esteroides parenterales el 26.3% en adultos y el
          22.5% en niños. En el tratamiento de mantenimiento, el fármaco
          elegido como primera opción, en adulto, fue el BAI por el 37.6% de
          los encuestados y esteroides inhalados por el 34.1%. En los niños el
          34.7% BAI, 25.3% cromoglicato o nedocromil y el 14.7% corticoides
          inhalados (CI). Con respecto a los BAI se los recomendaba con más
          frecuencia para tratar síntomas, en 2do lugar para prevenirlos y
          luego como tratamiento continuo, tanto en adultos como en niños. La
          indicación de tratar y prevenir síntomas se hacía con más
          frecuencia en niños. Los promedios de dosis de CI normal y máxima
          para adultos y niños, fueron respectivamente 297 y 1176 y 254 y 618
          microgramos/día. La utilización de tratamiento hiposensibilizante en
          asma alérgico fue, como puntaje medio (desde 0, nunca hasta 3,
          siempre) 0.96 para adultos y 1.13 para niños. Se encontraron
          falencias notables en el tratamiento. En el asma agudo aproximadamente
          el 40% no utilizaba beta agonistas inhalantes como primera opción. En
          tratamiento de mantenimiento los CI fueron poco indicados, siendo sus
          dosis menor de la mitad que las recomendadas. Los BAI se utilizan poco
          para prevenir síntomas o para tratar síntomas cuando ocurren. Se los
          utiliza moderadamente como tratamiento continuo. La
          hiposensibilización se utiliza comúnmente y más que en la mayoría
          de los países. Abstract  Survery
          of medical specialists regarding asthma treatment. A survey about
          asthma management was conducted in a group of 300 chest physicians
          randomized from a list of the whole country. This paper dealt with the
          questions about treatment in acute asthma and during maintenance
          therapy in adults and in children older than 6 years. Of the
          questionnaires mailed, 98 responses were obtained (32.7%)); 71% of the
          responders were respiratory medicine specialists (RM), 12% RM +
          Internal Medicine (IM), 6% in RM + Allergy (A), 5% in A, 4% in IM and
          2% in IM + A. For the treatment of acute severe episodes 57.5% of the
          physicians chose nebulized or inhaled beta agonists (IBA) as the first
          choice for adults and 63.4% for children, parenteral steroids 26.3% in
          adults and 22.5% in children. For maintenance therapy, the first
          choice formulation was IBA for adults in 37.6% of the responders and
          inhaled steroid (IS) in 34.1% of them. In children, 34.7% of the
          responders choose IBA, 25.3% cromoglicate or nedocromil and 14.7% IS.
          IBA were prescribed more commonly for treating symptoms, secondly for
          preventing symptoms and in third place for continuous preventive
          treatment in adults and in children. The recommendation of IBA for
          treating and preventing symptoms were more commonly done in children.
          The average normal daily dose of IS was 297 and 254 micrograms for
          adults and children, respectively. The average maximal dose was 1176
          and 618 micrograms for adults and children, respectively. The
          recommendation of hyposensitization for allergic asthma was, as mean
          score of frequency of use (from 0 = never to 3 = always), 0.96 for
          adults and 1.13 for children. Important drawbacks were detected in the
          treatment approach. In acute asthma episodes about 40% of the
          responders did not use IBA as the first choice of treatment. For
          maintenance treatment IS were rarely used, and their doses were less
          than the usually recommended by different guidelines. IBA were seldom
          recommended for prevention or treatment of symptoms. They are used
          moderately as continuous preventive treatment. Hyposensitization is
          commonly recommended and more frequently used than in other countries.   Dirección postal: Dr. Guillermo A. Raimondi, Instituto de
          Investigaciones Neurológicas Raúl Carrea - FLENI, Montañeses 2325,
          1428 Buenos Aires, ArgentinaFax: 54-1-784-7620; e-mail: raimondi@fleni.org.ar
 Recibido: 17-VII-1997 Aceptado: 13-VIII-1997   La mortalidad del asma bronquial no es uniforme en todos los
          países. Mientras que en algunos no ha habido modificaciones de la
          misma en los últimos años en otros se han observado aumentos
          evidentes1. Las razones de estas discrepancias no son claras. Se ha
          sugerido que la falta de controles objetivos de la obstrucción de la
          vía aérea durante el acceso agudo así como el retardo en iniciar
          terapéutica agresiva, particularmente corticoides, pueden ser
          responsables de un significativo número de víctimas fatales.
          También se ha sugerido que la utilización de algunas drogas así
          como un enfoque poco racional, sin tratar el componente inflamatorio,
          podría causar aumento de morbilidad y eventualmente mortalidad en el
          asma bronquial.En los últimos años distintos consensos de tratamiento, nacionales y
          extranjeros2-5 han delineado el manejo y tratamiento del asma
          bronquial. Si bien todos ellos han puesto énfasis en el control
          objetivo de la obstrucción de la vía aérea y el tratamiento
          racional del componente inflamatorio no es facil conocer si
          eventualmente estos lineamientos son generalmente utilizados.
 En un intento por obtener información objetiva acerca de diferentes
          enfoques del tratamiento del asma se realizaron encuestas tanto sobre
          diagnóstico como tratamiento en Europa en 19846 y en EE.UU. de N.A.
          en 19857. Otra encuesta similar se repitió en 1992 en Europa, EE. UU.
          de N.A., Canadá, Australia, Nueva Zelanda y Japón, el International
          Questionnaire on Asthma Management (IQAM)8.
 Con la idea de evaluar el enfoque y tratamiento del asma bronquial en
          nuestro medio se realizó en Argentina una encuesta utilizando el
          mismo cuestionario del estudio internacional de 1992. Esto permitía
          asimismo, comparar el enfoque de los especialistas argentinos con el
          de los otros países.
 Materiales y métodos El cuestionario consistía en 35 preguntas de las cuales 3 eran
          sobre datos personales de los encuestados, 4 sobre métodos
          diagnósticos, 17 sobre Información y Manejo (información y
          educación) del paciente y 11 sobre tratamiento agudo del acceso y
          especialmente sobre el tratamiento del asma estable. Estas preguntas
          se referían tanto al tratamiento en adultos como en niños mayores de
          6 años.El cuestionario fue enviado a un grupo de 300 especialistas de
          pulmón. Este provenía de la randomización de un listado de 1093
          especialistas de todo el país. Al no existir en nuestro medio una
          única Sociedad o Institución que agrupara a todos ellos, el listado
          de los mismos fue suministrado por la industria farmacéutica a
          través de múltiples informaciones. Similar procedimiento se realizó
          en algunos de los países con estas características en la encuesta de
          1992. El cuestionario se remitió por correo en Junio de 1994. En una
          carta adjunta se solicitaba al médico efectuar sus respuestas «en
          promedio», es decir teniendo en cuenta la «actitud en promedio» que
          se toma frente a un «paciente asmático promedio».
 Referente al encuestado se le preguntaba si era especialista en: a)
          Neumonología, b) Medicina Interna, c) Alergia. Con posibilidad de
          señalar una o más especialidades. Asimismo se lo interrogaba acerca
          de su antigüedad en la especialidad y el porcentaje de pacientes que
          veía en los diferentes grupos de edad (6 a 15, 17 a 44, 45 a 65, más
          de 65 años).
 En este trabajo se analizaron exclusivamente las respuestas referentes
          al tratamiento. Las principales preguntas fueron las siguientes:
 1. En el asma agudo, entre un listado de los siguientes medicamentos
          ¿cuál considera que es la secuencia correcta de tratamiento?
          (indicando el orden, primera elección = 1, cuarta elección = 4)
 - Anticolinérgico parenteral
 - Anticolinérgico inhalado o nebulizado
 - Esteroide parenteral
 - Beta agonista inhalado o nebulizado
 - Aminofilina parenteral
 - Beta agonista parenteral
 - Adrenalina parenteral
 - Otros (nómbrelos)
 2. En el tratamiento de mantenimiento ¿cuál considera que es la
          secuencia de elección entre los siguientes medicamentos? (indicando
          el orden, primera elección = 1, cuarta elección = 4)- Beta agonista inhalado (excepto nuevos de acción prolongada)
 - Beta agonista oral
 - Teofilina oral
 - Anticolinérgico inhalado
 - Cromoglicato sódico o nedocromil inhalado
 - Esteroide inhalado (dosis alta o baja)
 - Esteroide oral
 - Ketotifeno oral
 - Otros (nómbrelos)
 3. En un listado de 9 fármacos o asociaciones de fármacos ¿con
          qué frecuencia los utiliza como elección en la terapia de
          mantenimiento? (contestar 0, 1, 2 ó 3)0 = nunca (casi) < 10%
 1 = Algunas veces 10-50%
 2 = a menudo 50-90%
 3 = simpre (casi) > 90%
 - Teofilina oral
 - Esteroide inhalado (dosis altas o bajas)
 - Cromoglicato sódico inhalado
 - Beta agonista inhalado (excepto nuevos de acción prolongada)
 - Beta agonista oral
 - Anticolinérgico inhalado
 - Ketotifeno oral
 - Nedocromil inhalado
 - Asociación de beta agonista y anticolinérgico inhalado
 4. Cuando Ud. receta un beta agonista inhalado indique con qué
          frecuencia recomienda su uso:a) Para tratar síntomas cada vez que ocurran
 b) Para prevenir síntomas (P. Ej. antes de la exposición a un factor
          desencadenante conocido)
 c) Como tratamiento preventivo continuo (incluso en ausencia de
          síntomas)
 (contestar 0, 1, 2 ó 3)
 5. Si los usa ¿cuáles son las dosis normal y máxima que Ud.
          recomienda de esteroides inhalados en aerosol? (dosis en
          microgramos/día) 6. ¿Con qué frecuencia realiza terapia de hiposensibili-zación
          en el asma alérgico? (contestar 0, 1, 2 ó 3) En el caso de frecuencia de uso (nunca, algunas veces, a menudo,
          siempre) tabuladas respectivamente 0, 1, 2 ó 3 se calculó una
          respuesta media ponderada (Tabla 1). Si el puntaje fuera 0
          significaría que la totalidad de los encuestados contestaron nunca,
          en el otro extremo si fuera 3 la totalidad contestó siempre. Resultados Se obtuvieron 98 respuestas (32.7% de los cuestionarios enviados).
          Los encuestados se definían especialistas en neumonología 71%,
          Neumonología + Medicina Interna 12%, Neumonología + Alergia 6%,
          Alergia 5%, Medicina Interna 4% y Medicina Interna + Alergia 2%. Es
          decir el 89% se declaraba especialista en Neumonología. El 13%
          especialistas en Alergia. El promedio de ejercicio de la especialidad
          de los encuestados fue de 15.1 + 6.2 (DS) años. El porcentaje en
          promedio de pacientes visto para los distintos grupos de edad fue:
          23.1% de 6 a 15 años, 35.9% de 16 a 44 años, 21.8% de 45 a 65 años
          y 11.2% de más de 65 años.Respecto a tratamiento de asma agudo, aproximadamente el 60% de los
          encuestados optaron en primer lugar por los beta agonistas inhalados y
          alrededor del 25% por corticoides por vía parenteral, tanto en
          adultos como en niños. Menos del 10% de los encuestados eligieron
          como primera opción aminofilina parenteral o adrenalina parenteral
          (Tabla 2).
 Con referencia al tratamiento de mantenimiento, el fármaco elegido
          como primera opción, en el caso de los adultos, fueron los beta
          agonistas inhalados por el 37.6% de los encuestados y los esteroides
          inhalados por el 34.1%. En el caso de los niños, el 34.7% optaba por
          beta agonistas inhalados y el 25.3% por cromoglicato o nedocromil. Los
          esteroides inhalados sólo fueron elegidos como primera opción por el
          14.7% de los encuestados. (Tabla 3)
 Con respecto a la frecuencia de utilización de distintos fármacos
          como elección en la terapia de mantenimiento, para adultos, fue
          primero el corticoide inhalado seguido por los beta agonistas
          inhalados y aminofilina oral. En el caso de los niños, primero beta
          agonistas inhalados y corticoides inhalados, en casi la misma
          proporción, seguido por cromoglicato inhalado y ketotifeno oral. El
          esteroide inhalado fue más utilizado en adultos que en niños y el
          cromoglicato inhalado notablemente más utilizado en niños (Tabla 4)
 Con respecto a los beta agonistas inhalados la indicación con que con
          más frecuencia se recomendaba su uso era para tratar síntomas, en
          segundo lugar para prevenirlos y luego como tratamiento continuo,
          tanto en adultos como en niños. La indicación de utilización de los
          mismos tanto para tratar síntomas como para prevenirlos se hacía con
          más frecuencia en los niños (Tabla 5).
 Respecto de los esteroides inhalados los promedios de dosis en
          microgramos, normal y máxima, fueron 297 y 1176 para adultos y 254 y
          618 para niños, respectivamente.
 La frecuencia de utilización de terapia de hiposensi-bilización en
          asma alérgico fue, como puntaje medio (desde 0, nunca hasta 3
          siempre): adultos 0.96, niños 1.13.
 Discusión Si bien a través del diseño del trabajo (randomización del total
          de especialistas del país) se pretendió lograr información
          representativa del grupo, en la práctica el bajo grado de respuestas
          (32.7%) limitó la pureza del estudio. Se puede cuestionar si los
          resultados son representativos del total de especialistas del país y
          si hubieran sido diferentes con las respuestas de los que no
          contestaron. Es plausible suponer que tal vez este grupo de no
          contestadores tenga inseguridad al no poseer formación suficiente o
          por desinterés, aunque esta actitud se pueda manifestar también en
          su entrenamiento y actualización. Asimismo tendría que tenerse en
          cuenta si algunas de las respuestas reflejan lo que realmente hacen
          estos especialistas o lo que deberían hacer. Sin embargo con todas
          estas limitaciones, el poder analizar una muestra de 100 de ellos lo
          consideramos de utilidad como orientación general.Los países que participaron en el IQAM tuvieron muy distinto grado de
          respuesta. Si bien en promedio éste fue del 49% hubo extremos como
          Japon, Dinamarca y el Reino Unido con 83, 81 y 74% respectivamente
          hasta España, Grecia y Portugal con el 30, 28 y 25% respectivamente.
          Este grado de respuesta tan disímil puede deberse a la idiosincrasia
          de los países y posiblemente a la educación y la cultura médica
          (Fig. 1).
 Es evidente que hay distintas pautas en cuanto al correcto enfoque del
          tratamiento y manejo del asma claramente aceptadas y regladas en
          distintas publicaciones y consensos de tratamiento1, 2-5, 9. Tal es el
          caso de la indicación de utilizar beta 2 agonistas inhalados en el
          asma agudo, el enfoque del asma bronquial como enfermedad inflamatoria
          con recomendación de uso de corticoides inhalantes en el tratamiento
          del asma estable, utilización de beta 2 agonistas ante aparición de
          síntomas o preventivamente, datos de enseñanza al paciente de su
          enfermedad, utilización de métodos objetivos para cuantificar la
          obstrucción de la vía aérea, métodos diagnósticos aceptados
          (estos tres últimos no analizados en este trabajo). En este sentido
          cuando analizamos los resultados del IQAM observamos, en base a estas
          pautas, que algunos países califican habitualmente bien tales como
          Nueva Zelanda, Reino Unido, Irlanda, Canadá y Australia y otros en
          general mal, tales como los países de Europa del Este
          (Chekoslovaquia, Polonia, Hungría), Grecia y Portugal. Es interesante
          en estas comparaciones observar cómo se insertan las respuestas de
          nuestra encuesta.
 En el caso de elección de los medicamentos en el asma agudo la
          secuencia pareció la correcta; primero beta agonistas inhalados,
          segundo corticoides por vía parenteral y tercero aminofilina
          parenteral (Tabla 2). Sin embargo, si analizamos el porcentaje de
          encuestados que elije como primera opción beta agonista inhalado
          (tanto en adultos como en niños) vemos que lo hacen sólo alrededor
          del 60%. Esto significa que aproximadamente 4 de cada 10 encuestados
          no los usa como primera opción a pesar de estar claramente probada su
          eficacia sobre otras medicaciones en asma agudo1, 9 y el estar
          unánimemente recomendada por todos los consensos2 - 5. Si comparamos
          estos resultados con los de los otros países comprobamos que la
          utilización de beta agonistas en el acceso agudo en nuestros
          especialistas está por debajo de la mayoría de países que
          característicamente califican mejor (Fig. 2).
 Respecto al tratamiento de mantenimiento, el orden de elección fue el
          de esperar (Tabla 3 y 4) con valores similares de beta agonistas y
          corticoides inhalados en el adulto y como segunda opción en los
          niños el cromoglicato o nedocromil. Observándolo así, y no habiendo
          aclarado en la pregunta la severidad o la frecuencia de los síntomas,
          es lógico que la utilización de los beta agonistas inhalados y los
          corticoides inhalados hubieran sido similares. Sin embargo, si
          comparamos el uso de corticoides inhalados como terapia de
          mantenimiento en los adultos con respecto a otros países, podemos ver
          que nuestros especialistas califican mal estando en el grupo que
          utiliza poco esta terapéutica desinflamatoria (Fig. 3). Esto está en
          desacuerdo con lo aconsejado por los distintos consensos para el
          tratamiento de mantenimiento al menos en asma moderada2 - 5. Asimismo
          observamos que el 28.3%, en el caso de los adultos y 25.3% en niños,
          escogieron como primera opción de tratamiento distintos fármacos que
          no están indicados como primera línea de tratamiento ni por
          consensos ni por publicaciones del tema1 - 5 (Tabla 3).
 Con referencia a los corticoides inhalados, en el mercado nacional en
          1994 beclometasona y budesonide, las dosis utilizadas, tanto normal
          como máximas fueron bajas comparándolas con las sugeridas por
          distintos consensos. Por ejemplo, el Consenso Internacional indica
          iniciar tratamiento con 200 a 500 microgramos/día4 y eventualmente
          aumentarlos hasta 750 microgramos. El Consenso Argentino sugiere para
          el nivel 2 (disnea o tos 2-3/día, asma nocturna < 2 veces /mes)
          una dosis de 400 microgramos/día y para el nivel 3 (disnea o tos
          diarias, asma nocturna > 2 veces/mes) 600 microgramos/día4. Las
          guías británicas inician tratamiento con 100 a 400 microgramos dos
          veces al día5. Por otro lado, las dosis máximas recomendadas por
          estos tres consensos, siempre para adultos son de > 1 000, 2 000 ó
          2 000 microgramos, respectivamente3 - 5. El promedio de dosis
          utilizada por nuestros especialistas está muy por debajo de estos
          valores recomendados.
 Esta utilización de dosis tan bajas de corticoides inhalados puede
          deberse, en parte, a la falta de formulaciones más potentes con más
          dosis por «puff» al momento del estudio. Aclaremos que la
          beclometasona de mayor potencia había sido introducida en el mercado
          recien en 1993 y la fluticasona luego en 1995. Comparados con otros
          países las dosis utilizadas por nuestros especialistas son las más
          bajas (Fig. 4 y 5).
 Se puede observar que la utilización del cromoglicato es notablemente
          más común en los niños que en los adultos, posiblemente por su
          mejor acción terapéutica en aquellos y también por la resistencia
          habitual a administrar corticoides inhalantes en pediatría, entre
          otras cosas, por su posible efecto sobre el crecimiento10. Por esta
          misma razón posiblemente se explique la menor utilización de
          corticoides inhalados en los niños vs. los adultos (Tabla 3 y 4). De
          manera similar el ketotifeno es un medicamento medianamente utilizado
          en niños y prácticamente sin uso en adultos.
 La teofilina oral, al menos en el caso de los adultos (Tabla 2), está
          moderadamente utilizada. Esto no está de acuerdo con las
          recomendaciones actuales, en las cuales su uso está limitado teniendo
          en cuenta sus comunes efectos colaterales y bajo margen de
          seguridad11. Si lo comparamos con otros países, nuestros valores son
          aún más altos que los de USA donde característicamente siempre fue
          muy utilizada7.
 El uso de beta agonistas inhalados está claramente indicado tanto
          para el tratamiento de síntomas cada vez que éstos ocurran como para
          prevenir síntomas (Ej: previo al esfuerzo físico en el asma inducida
          por el ejercicio)1 - 5. En tal sentido, el puntaje obtenido a esta
          pregunta tanto en adultos como en niños, debería haber sido 3, todos
          haber contestado siempre. Si observamos la comparación con los datos
          de otros países nuestros especialistas están entre los que
          recomiendan menos su utilización (Fig. 6 y 7).
 Con respecto al uso de beta agonistas como tratamiento preventivo
          continuo no hay acuerdo unánime en cuanto a su utilidad o su
          riesgo12, 13. Hay quienes sostienen que su uso continuo puede
          ocasionar aumento de hiperrreactividad bronquial y mal manejo del
          bron-coespasmo, mientras que otros lo niegan. Es difícil dilucidar
          cuál es la posición correcta. Sin embargo, nuestros especialistas se
          encuentran en el grupo de los que lo indican con frecuencia (Fig. 8).
          Hay países, que ya sea por su idiosincrasia o por haberse visto
          involucrados en epidemias de alta mortalidad adjudicadas a la
          utilización de beta agonistas, los utilizan claramente menos. Tal es
          el caso, entre otros, de Nueva Zelanda, Reino Unido y Canada.14 - 16
 La frecuencia de utilización de terapia de hiposensi-bilización fue
          similar, tanto en niños como en adultos (puntaje medio 0.96 y 1.13,
          respectivamente). Estos valores a priori parecen bajos. Sin embargo,
          si tenemos en cuenta que esta es una terapéutica de valor no probado
          en el asma bronquial su utilización parece haber sido relativamente
          alta17 - 18. El consenso nacional afirma que la «... inmunoterapia no
          es útil para el tratamiento del asma bronquial». Las guías
          británicas dicen que «... los beneficios de la inmunoterapia no
          están probados». Sólo los consensos americanos e internacionales2,
          3 afirman que la inmunoterapia debe ser considerada cuando no se
          pueden evitar alergenos y la medicación apropiada falla para
          controlar los síntomas de asma (!?) y sólo para pacientes con
          sensibilidad probada a único alergeno. Aun aceptando esto, la
          proporción de pacientes que cumplan estas condiciones debe ser
          extremadamente baja. Sin embargo, la utilización por parte de
          nuestros especialistas es alta. Si comparamos con otros países,
          nuestros profesionales se encuentran en el grupo de los que la indican
          con más frecuencia (Fig. 9).
 En resumen, con las limitaciones ya consignadas, principalmente por la
          baja respuesta obtenida a los cuestionarios, el análisis del enfoque
          del tratamiento que realizan 100 especialistas del país lo
          consideramos orientativo y de utilidad. Es de hacer notar que
          encontramos falencias notables en el enfoque del tratamiento. Respecto
          del tratamiento del acceso agudo, aproximadamente el 40% de los
          encuestados no utiliza los beta 2 agonistas inhalados como primera
          opción. En el tratamiento de mantenimiento, los corticoides inhalados
          son menos indicados que en otros países siendo sus dosis menos de la
          mitad de las recomendadas en distintos consensos. Si comparamos estas
          dosis con las del estudio del IQAM, nuestra dosis son las más bajas.
          Los beta 2 agonistas se utilizan poco para prevenir síntomas o para
          tratar síntomas cuando ocurren. Se los utiliza mucho en el
          tratamiento continuo a pesar que algunos han puesto en duda su
          utilidad y seguridad. La hiposensi-bilización se utiliza comúnmente
          y más que en la mayoría de los países.
 Todas estas consideraciones sugerirían que el enfoque del tratamiento
          hecho por nuestros especialistas no es óptimo y es peor que en muchos
          de los países comparados. Consideramos necesario esforzarnos en
          lograr por distintos medios la educación continua en nuestros
          especialistas. La sola formulación de guias de tratamiento o
          consensos no es suficiente. Ya se ha señalado que si bien son capaces
          de cambiar algo la actitud y el conocimiento, las pautas de
          tratamiento son más difícilmente modificadas19, 20.
 Agradecimientos: El autor agradece al Prof. Paul Vermeire,
          miembro del Comité del International Questionnaire on Asthma
          Management, el facilitar el material y su colaboración para realizar
          esta encuesta. Asimismo, se agradece el apoyo técnico y económico al
          Laboratorio CIBA (hoy Novartis). Addendum
 Código de países:
 A: Austria; AUS: Australia; B: Bélgica; CDN: Canada; CH: Suiza; CS:
          Checoslovakia; D: Alemania; DK: Dinamarca; E: España; F: Francia; GR:
          Grecia; H: Hungría; I: Italia; IRL: Irlanda; J: Japón; N: Noruega;
          NL: Holanda; NZ: Nueva Zelanda; P: Portugal; PL: Polonia; RA:
          Argentina; S: Suecia; SF: Finlandia; UK: Reino Unido de Gran Bretaña;
          USA: EE. UU. de Norte América
 El cuestionario completo está a disposición de los interesados
          solicitándolo al autor.
 Bibliografía 1. McFadden ER Jr, Gilbert IA. Asthma. N Engl J Med 1992; 327:
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          National Institutes of Health. Publication No. 91-3042A, June 1991.
 3. International Consensus Report on Diagnosis and Management of
          Asthma. Bethesda. Md: National Heart, Lung and Blood Institute,
          National Institutes of Health, publication No. 92-3091, June 1992.
 4. Roncoroni AJ, Abbate E, Figueroa Casas JC, Gene R, Martelli N,
          Quadrelli S y col. Normas establecidas por consenso para el
          tratamiento del asma bronquial y sus exa-cerbaciones. Medicina (Buenos
          Aires) 1993; 53: 249-59.
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          Audit of Asthma Therapy. Chest 1986; 90: 58S-61S.
 7. Hodkin JE. United States Audit of Asthma Therapy. Chest 1986; 90:
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 8. Hodkin JE. International Scope of Asthma Therapy. Symposium. 58th
          International Scientific Assembly. American College of Chest
          Physicians. Chicago, Illinois. October 1992.
 9. Corbridge TC, Hall JB. The assessment and management of adults with
          status asthmaticus. Am J Respir Crit Care Med 1995; 151: 1296-316.
 10. Wolthers OD, Pedersen S, Growth of asthmatic children during
          treatment with budesonide: a double blind trial. BMJ 1991; 303: 163-5.
 11. Weinberger M, Hendeles L. Theophylline in asthma. N Engl J Med
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 12. Roncoroni AJ. Broncodilatadores beta adrenérgicos en asma
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          et al. Is the association between inhaled beta-agonist use and
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 15. Speizer FE, Doll R, Heaf P. Observations on recent increase in
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 17. Quadrelli SA, Roncoroni AJ. Inmunoterapia en el asma bronquial:
          existe la controversia? Medicina (Buenos Aires) 1994; 54: 605-8.
 18. Norman PS, Barnes PJ. Is there a role for immuno-therapy in the
          treatment of asthma? Yes. No. Am J Respir Crit Care Med 1996; 154:
          1225-8.
 19. Lomas J, Anderson GM, Dominck-Pierre K, Vayda E, Enkin MN, Hannah
          WJ. Do practice guidelines guide practice? The effects of the
          consensus statement on the practice of physicians. N Engl J Med 1989;
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 20. Hartert TV, Windom HH, Stokes Peebles R, Freidhoff LR, Togias A.
          Inadequate outpatient medical therapy for patients with asthma
          admitted to two urban hospitals. Am J Med 1996; 100: 386-94.
 
 Fig. 1.- Porcentaje de
          respuestas obtenidas de las encuestas en los distintos países.
          Código de países, ver Addendum, pág. 35. Fig. 2.- Porcentaje de
          encuestados que eligen como primera opción beta agonistas inhalados
          para el tratamiento del acceso agudo en adultos. Código de países,
          ver Addendum, pág. 35.Fig. 3.- Utilización de corticoides inhalados como terapéutica de
          mantenimiento en adultos para distintos países. Resultados expresados
          como respuesta media ponderada (0 = nunca, 3 = siempre). Código de
          países, ver Addendum, pág. 35.
 Fig. 4.- Dosis usual diaria
          de esteroides inhalados en adultos para distintos países. Código de
          países, ver Addendum, pág. 35. Fig. 5.- Dosis máxima
          diaria de corticoides inhalados en adultos para distintos países.
          Código de países, ver Addendum, pág. 35.Fig. 6.- Recomendación de uso de beta agonistas inhalados cada vez
          que haya síntomas en adultos. Resultados expresados como respuesta
          media ponderada (0 = nunca, 3 = siempre). Código de países, ver
          Addendum, pag. 35.
 Fig. 7.- Recomendación de uso de beta agonistas inhalados para
          prevenir síntomas en adultos. Resultados expresados como respuesta
          media ponderada (0 = nunca, 3 = siempre). Código de países, ver
          Addendum, pág. 35.
 Fig. 8.- Recomendación de uso de beta agonistas inhalados como
          tratamiento continuo en adultos. Resultados expresados como respuesta
          media ponderada (0 = nunca, 3 = siempre). Código de países, ver
          Addendum, pág. 35.
 Fig. 9.- Utilización de tratamiento hiposensibilizante en adultos.
          Resultados expresados como respuesta media ponderada (0 = nunca, 3 =
          siempre). Código de países, ver Addendum, pág. 35.
   TABLA 1[N0 x 0] + [N1 x 1] + [N2 x 2] + [N3 x 3]
 Puntaje medio =
 NT
 N0 = Nro de respuestas nuncaN1 = Nro de respuestas algunas veces
 N2 = Nro de respuestas a menudo
 N3 = Nro de respuestas siempre
 NT = Nro de respuestas totales
 TABLA 2.- Tratamiento de asma agudo Medicamento elegido como primera opción Adultos % Niños % Beta agonista inh. 57.5 Beta agonista inh. 63.4Esteroide parent. 26.3 Esteroide parent. 22.5
 Aminofilina par. 8.8 Adrenalina parent. 8.5
 Adrenalina parent. 6.0 Aminofilina par. 5.6
 Anticol. inhalado 1.0 -
 Porcentaje de encuestados que optaron por dicho medica-mento como
          primera opción. TABLA 3.- Tratamiento de mantenimiento Medicamento elegido como primera opción Adultos % Niños % Beta agonista inh. 37.6 Beta agonista inh. 34.7Esteroide inhalado 34.1 Cromog./Nedocrom. 25.3
 Teofilina oral 7.1 Esteroide inhal. 14.7
 Anticol. inhalado 4.7 Ketotifeno oral 10.7
 Cromog./Nedocrom. 4.7 Teofilina oral 6.7
 Esteroide oral 4.7 Beta ag. oral 5.3
 Ketotifeno oral 3.5 Anticol. inh. 1.3
 Beta ag. oral 2.4 Esteroide oral 1.3
 Otros 1.2
 Porcentaje de encuestados que optaron por dicho medica-mento como
          primera opción. TABLA 4.- Tratamiento de mantenimiento Frecuencia de utilización de distintos fármacos Adultos % Niños % Esteroide inhalado 2.26 Beta agonista inh. 1.61Beta agonista inh. 2.16 Esteroide inhalado 1.58
 Teofilina oral 1.41 Cromoglicato inh. 1.43
 B.Ag.+anticol 0.93 Ketotifeno oral 1.12
 Cromoglicato inh. 0.84 Teofilina oral 1.07
 Anticol. inh. 0.74 Beta ag. oral 0.63
 Nedocromil inh. 0.49 Nedocromil inh. 0.35
 Beta ag. oral 0.48 Anticol. inh. 0.26
 Puntaje medio obtenido (desde 0, nunca; hasta 3, siempre) TABLA 5.- Indicación de beta agonistas inhalados Adultos Niños Para tratar síntomas cada vez que ocurran 1.96 2.30Para prevenir síntomas 1.57 1.94
 Como tratamiento continuo 1.23 1.23
 Puntaje medio (desde 0, nunca; hasta 3, siempre) 
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